Durante la audiencia realizada en los Tribunales locales, la Fiscal Marcela Pérez pidió la prorroga de la prisión preventiva para los dos imputados por 30 días, fundado en el peligro de entorpecimiento que podrían ejercer los jóvenes en caso de encontrarse en libertad. Además la fiscal se basó en la rueda en reconocimiento, que dio positiva para uno de los imputados. Por su parte, la defensora pública María Angélica Leyba planteó que no existen suficientes fundamentos ni pruebas para mantener la prisión preventiva y sugirió que “el reconocimiento positivo tampoco lo vincula con el hecho” a uno de los imputados. No obstante y “a los fines de aventar los peligros procesales solicitó la prisión domiciliaria” para el joven que fue reconocido como uno de los agresores y la libertad para el restante.
Finalmente, el Juez Hernán Granda, quien reemplaza momentáneamente a su par Néstor Lorenzetti en la causa, afirmó: “Conozco el hecho y conozco la magnitud de la violencia que se ha ejercido contra personas mayores. Hay una extremada violencia innecesaria y por esta cuestión no sería difícil imaginar que se podría trasladar esa violencia contra otras personas” tal cual lo expresó la fiscal. Además contradijo a la defensora y aclaró que con respecto a Raúl Curaqueo, el imputado identificado, “se ha incrementado en forma notable la probabilidad de autoría. Ya que lo señalan sin duda como una de las personas involucrada y se lo coloca en una situación mayor que el otro imputado, que no fue reconocido”. De esta forma y luego de las aclaraciones, el juez hizo lugar parcialmente a las peticiones de la fiscalía y de la defensa. “Cuando uno proporciona una medida debe merituar la proporcionalidad del hecho que se le endilga y el grado de probabilidad que sea autor. Respecto a uno de ellos no están dados los requisitos para que continué detenido, por lo cual voy a disponer la libertad con la restricción de acercarse a la victima y a su domicilio por 200 metros” pero “voy a prolongar la prisión preventiva del otro por el lapso de un mes” finalizó el Juez Granda.
EL HECHO Días pasados ingresaron dos sujetos a una vivienda céntrica y golpearon a sus ocupantes, para luego huir en un automóvil. Al ingresar al lugar, uno de los delincuentes empujó a una mujer de avanzada edad, a quien ató con alambre, y luego entre dos golpearon a otras dos personas que se encontraban en el lugar. Después de varios minutos en el lugar, los delincuentes se escaparon en un vehículo Volkswagen Gol Gris, que fue seguido por vecinos de la familia damnificada, ante la sospecha de que se hubiera cometido un ilícito en esa vivienda. El auto, que sería conducido por una tercer integrante que está identificado y se encuentra prófugo, fue abandonado en barrio la zona oeste de la ciudad. Horas más tarde, los policías secuestraron el vehículo y detuvieron a dos personas, sospechosos de realizar la agresión. Como consecuencia del violento suceso, las personas golpeadas sufrieron lesiones graves, aunque no revestían riesgo de vida. [gallery columns="9"]