El tribunal de enjuiciamiento compuesto por Fabio Monti, Ivana González y Mirta Moreno notificó hoy a las partes acerca de las condenas impuestas a Marcos Maurleia y Paola Cárdenas, autores del homicidio de Osvaldo Rubén Abarzúa Soto y de una tentativa de homicidio respectivamente, ocurrido tras un hecho en el barrio Moreira 4 de Trelew. Durante el juicio oral la fiscal general Carolina Marín estuvo a cargo de la parte acusatoria, Cárdenas fue defendida por el defensor público Sergio Rey y Maurelia contó con el asesoramiento legal de Rodrigo Miquelarena y Martín Castro.

Los Jueces resolvieron condenar a Marcos Mauricio Maurelia a la pena de diecisiete años de prisión, accesorias legales y costas, como autor penalmente responsable del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en calidad de autor en perjuicio de Osvaldo Rubén Abarzúa Soto, en concurso real con tentativa de homicidio simple en carácter de coautor en perjuicio de Mario González, artículos 79, 41 bis, 55, 42 y 45 del código penal, declarando la reincidencia del nombrado, de acuerdo al artículo 50 del mismo código.

También determinó condenar a Paola Elizabeth Cárdenas a la pena de cuatro años y seis meses de prisión, accesorias legales y costas, en orden al delito de homicidio en grado de tentativa en carácter de coautora, artículos 79, 42 y 45 del código penal en perjuicio de Mario González.

El hecho

 El Ministerio Público Fiscal a través de la fiscal general Carolina Marín pudo acreditar durante el debate con la presentación de las pruebas testimoniales, documentales y periciales que el 30 de junio de 2018, cerca de las 15,30, los imputados Marcos Maurelia y Paola Cárdenas se acercaron al barrio Moreira 4 trasladándose en un fiat punto color negro, intentando acceder al domicilio de Mario González. Allí, con una masa Paola Cárdenas golpeaba la puerta de entrada, cuando se apersonó el propietario y fue agredido por Marcos Maurelia, quien lo tomó del cuello y una vez derribado, ambos comenzaron a golpearlo violentamente con la herramienta y una piedra de gran tamaño, provocando graves fracturas en la mandíbula y costillas de la víctima, que sin embargo logró escaparse hasta un domicilio vecino, donde fue auxiliado y trasladado al hospital.

De todas maneras, los agresores lejos de alejarse se dirigieron al terreno de la vivienda donde se refugió González y accediendo por la parte trasera Maurelia tomó un arma de fuego y efectuó varios disparos hacia el interior, impactando uno de ellos en la cabeza de Osvaldo Rubén Abarzúa Soto, quien falleció el 2 de julio en el hospital zonal. Los imputados se dieron a la fuga en el vehículo con el que habían arribado, y a partir de ese momento se efectuó una serie de allanamientos, dictándose la orden de captura, a partir de los testimonios y reconocimientos, pero recién pudieron ser hallados y detenidos el 24 de agosto.