El Tribunal de Enjuiciamiento, integrado por los Jueces Darío Arguiano, Sergio Piñeda y Adrián Barrios, resolvió dejar en libertad a Mirta Inés Gil, quien venía padeciendo el arresto domiciliario, aunque el próximo martes 10 de mayo a las 12 dará a conocer la pena que se le impondrá por el delito de homicidio preterintencional, tal la sentencia dada a conocer en el día de ayer.   La decisión se tomó, según lo informaron, debido a que la pena solicitada por el Ministerio Público Fiscal a través de la Fiscal General, Mirta Moreno, es de tres años, siendo el pedido fiscal limitante del máximo a fijar. En todo caso, si se llegara a dar esta condena, la misma sería de cumplimiento condicional y teniendo en cuenta el artículo 13 del Código Penal, están superados los ocho meses para acceder a la libertad condicional, si se tiene en cuenta que Mirta Gil se encuentra bajo medida de coerción desde hace un año y dos meses.   En todo caso, y de acuerdo a la decisión que se adopte, se podría llegar a imponer una serie de normas restrictivas que no afectarían la libertad de la imputada, previstas en el art 27 bis, dijo el Dr. Arguiano, informando sobre el cese de la prisión preventiva.   Antes se había desarrollado el debate de pena,  y la Fiscalía pidió tres años de prisión, conforme a la decisión del tribunal y las pautas mensuradas en los arts. 40 y 41 del Código de Procedimiento Penal. Mencionó la Dra. Moreno la naturaleza del hecho, la pérdida irremediable, el daño causado a los hijos y familia con el padre y hermano como víctima.   Por su parte, la defensa ejercida por Sergio Rey enfatizó en los testimonios de los propios hijos, recordando palabras del mayor: "mi padre fue buen trabajador, buena persona, pero le faltó el respeto a mi mamá, falló como esposo". Y esta es la realidad que han vivido las víctimas, dijo el abogado, subrayando la decisión del cuerpo colegiado en cuanto al delito imputado, observando la situación socio cultural, la historia de vida, sin antecedentes y el contexto con el cuál entró en contacto con la Ley Penal.   Mas allá de solicitar el mínimo imponible en estos casos, es decir un año de prisión, manifestó que correspondía la determinación de libertad inmediata de su cliente, al recordar que se encuentra bajo arresto hace un año y dos meses. A esto se opuso el Ministerio Público Fiscal, expresando su representante que los magistrados no contaban todavía con todos los datos que permitieran evaluar una sentencia adecuada.   Lo cierto es que Mirta Inés Gil no tendrá ya obligación de permanecer en el domicilio donde se encontraba bajo arresto, en tanto se espera la pena definitiva. En la sala se encontraban su hija y una sobrina, que atestiguó en favor de la defensa, y las hermanas de la Quiroga, quienes siguieron en forma permanente el transcurrir del Juicio Oral y Público.   El 28 de marzo de 2010, cerca de las 8,30,  Mirta Inés Gil dió muerte a su marido utilizando un cuchillo, después de haber discutido y sufrido agresiones de su parte, en un hecho ocurrido en el domicilio de la familia, ubicado en el barrio Amaya de Trelew. El caso despertó una singular expectativa, enmarcado en una profunda problemática de violencia familiar y de género, con situaciones sin una adecuada contención que culminan de la peor manera con episodios tan dolorosos como el  revivido a través de este Juicio Oral y Público.