En la primera jornada del juicio oral y público que se celebra en la sala de la Cámara del Crimen, sita en Monseñor D’andrea y Portugal de nuestra ciudad, se escuchó las declaraciones de ocho testigos, la de dos de los imputados en la causa, como también la presentación del caso por parte de Fiscalía, la Querella y la defensa de los imputados. El Tribunal estuvo presidido por la Dra. María Elena Nieva de Pettinari, e integrado por los Dres. Martín Montenovo y Luis María Pintos; el Ministerio Fiscal a cargo del Dr. Marcelo Cretton, Fiscal General, la querella representando a los padres de la víctima, Dr. Jorge Gutiérrez y Dr. Jorge Amado Gutiérrez; y la defensa de los imputados Gregorio y Paulo Olima, y de Juan Alanís a cargo de una abogada de la Defensa Pública y la de Daniel González por el Dr. Guillermo Iglesias, abogado de confianza del mismo. La calificación legal del hecho es de homicidio simple en calidad de autor para Daniel González y partícipes necesarios para Paulo Olima y Juan Alanís; y de lesiones graves para Ramón Olima.
En su relato de presentación el Fiscal Cretton adujo que le día 24 de febrero pasado, aproximadamente a las 5.00 hs., en cercanías al Camping Petroleros Privados, cercano al barrio Laprida de nuestra ciudad, caminaban las víctimas Lucas Hidalgo y Matías Celada, junto a dos jovencitas cuando son interceptados por al menos seis personas a bordo de un Renault 12. Celada corre hacia el interior de una chacra seguido por Gregorio Olima y otra persona, quién le provoca a Celada una herida con arma blanca en el tórax que “casi le causa su muerte”. Mientras Lucas Hidalgo es atacado a golpes de puño y puntapiés por Alanís, González y Paulo Olima, “Alanís agarra un pedazo de concreto y se lo arroja en la cara” a la víctima, mientras los otros dos siguen golpeándolo. Finalmente Daniel González arroja sobre su cráneo un pedazo de concreto de grandes dimensiones provocando su muerte, luego de agonizar dos días. La querella adhirió a los dichos de la Fiscalía y a la calificación legal para Hidalgo, pero no a la de Alanís y Gonzàlez, solicitando para ellos también la figura de homicidio simple en carácter de coautores y lesiones graves para uno de los hermanos Olima.
En contraposición la defensa de Daniel González solicitó la figura de lesiones graves para su defendido con respecto a Celada y subsidiariamente adujo “que ni la Fiscalía ni la querella van a poder probar el homicidio simple”. La defensa de Alanís y los hermanos Olima planteó un caso negativo ya que “no podrán comprobar la autoría” enfatizó; respecto de las lesiones graves causadas a Celada solicitó al Tribunal la figura de lesiones en agresión o en riña. Planteó a su vez la “ausencia o convergencia intencional, al estar ausente la intención de provocar los daños” o el resultado de una muerte.
Seguidamente se les tomó los datos a los imputados y los hermanos Olima accedieron a prestar declaración, pero no a ser preguntados. Ambos relatan que Melo los pasa buscar por la plaza y les cuenta que había tenido problemas en el camping con otra personas de Ferro, que les pegaban a los de Laprida; afirman que es Melo quién ataca a Hidalgo. Gregorio Olima admite una pelea con Celada, para luego volver ambos al auto y salir huyendo del lugar porque “venían como quince personas corriendo del Camping”.
Luego el Fiscal General solicita el testimonio de Lucas Melo, quién fuera condenado por encubrimiento agravado en un juicio abreviado y la incorporación como prueba de la extensión delinforme médico Calixto González, en relación a las heridas de Matías Celada. La querella adhiere a lo solicitado por el Fiscal y la Defensa de González se opone en tanto que la Defensora Pública no formula objeción a la misma. El Tribunal resolverá en otro momento del juicio la decisión sobre los pedidos.
Finalmente se les tomó juramento de decir verdad a los testigos y declararon dos oficiales ayudantes, uno de la Comisaría de Laprida y otro de General Mosconi, acerca de su intervención posterior al hecho, relataron inspección ocular. El Dr. Marcos van Meegrot sobre el certificado médico y el estado en que se encontraban las víctimas en el Hospital Regional. Seguidamente lo hizo un Oficial Inspector de la Policía Judicial y dos amigos de la víctima. Estos últimos estaban en el Camping aquella madrugada y llegaron al lugar del hecho por gritos que escucharon, relataron momentos posteriores al hecho. Mañana se continuará con la recepción de más testimonios.
