Audiencia de incidentes por el homicidio del suboficial Nelson Godoy

Así lo resolvió el juez penal por solicitud de la funcionaria de fiscalía en relación al hecho acontecido el pasado 20 de julio de 2012 que tiene como imputados a Bruno Díaz y Pablo Barrientos; y como víctima fatal al agente Nelson Godoy. Los defensores se opusieron a la solicitud de prórroga del plazo de investigación por parte de fiscalía, y también solicitaron la libertad de sus pupilos.

El acto fue presidido por Alejandro Soñis, juez penal; por el Ministerio Público Fiscal asistió Stella Maris Prada funcionaria de fiscalía; en tanto que la defensa de Barrientos estuvo a cargo de Ricardo Amado, y la de Díaz a cargo de María de los Ángeles Garro, ambos abogados de la defensa pública.

En un primer momento la funcionaria de fiscalía solicitó la prórroga del plazo de investigación en un mes, recordando que el pasado 18 de mayo se les formalizó a ambos imputados la apertura de investigación del caso por el delito de homicidio criminis causa a Díaz; y el de robo agravado por el uso de arma de fuego a Barrientos. El acusador público no ha concluido con la pericia balística ya que se designó como perito a Gendarmería.

Por su pate los defensores se opusieron a la solicitud de extensión del plazo de investigación ya que “no están dados los requisitos legales para solicitar prórroga”. Por su parte el juez penal resolvió hacer lugar a la solicitud de un mes de prórroga de plazo de investigación.

Seguidamente la funcionaria de fiscalía solicitó el mantenimiento de la prisión preventiva ya que continúan vigentes los motivos por los cuales les fue dictada. Los elementos de convicción suficientes para tenerlos como probables autores del hecho, y los peligros procesales de fuga y entorpecimiento de la investigación.

En contraposición los defensores se opusieron a la medida de coerción, argumentando que “se presume su inocencia” y que solo la gravedad de la calificación legal no se puede esgrimir como único argumento para solicitar la prisión preventiva. La restricción de la libertad es de carácter excepcional, negando la existencia de peligro de fuga ni entorpecimiento de la investigación, sostuvo el defensor de Barrientos. Solicitando medidas sustitutivas como presentaciones periódicas ante la autoridad; y subsidiariamente su arresto domiciliario.

De igual manera se pronunció la defensora de Díaz, oponiéndose al mantenimiento de la prisión preventiva por la no existencia de elementos de convicción, ni peligros procesales; solicitando su libertad ya que “no hay elementos nuevos para presumir su autoría”.

Finalmente el juez penal resolvió mantener la prisión preventiva de ambos imputados hasta la audiencia preliminar, en base a la gravedad del hecho, el peligro hacia las demás víctimas en la estación de servicio. Esto constituyen elementos suficientes para tener acreditados los peligros de fuga y entorpecimiento, consideró. También en la probabilidad de la autoría en base a los indicios para tenerlos como probables coautores del hecho.

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