En una audiencia de control de detención llevada adelante en sala de oficina judicial de Trelew el Ministerio Público Fiscal representado por el procurador de fiscalía Mauro Quinteros, acompañado por la abogada Camila Nardelli, presentó la solicitud de realización de un juicio rápido de acuerdo a lo dispuesto por el artículo 414 del código procesal penal en un caso de presunto robo de cables ocurrido en esta ciudad.

De acuerdo a lo relatado, el día 7 de noviembre cerca de las 23 la policía acudió ante llamados recibidos a la zona ubicada en calle Ecuador y Martín Rodríguez, donde pudo detener en flagrancia a Jorge Galindo quien se encontraba en el exterior de un pozo subterráneo, en tanto de su interior salían Andrés Jara y Aldo Yáñez. Se pudo secuestrar una mochila conteniendo elementos con los cuales habrían intentado el corte de cables de fibra óptica, ubicados en el sitio. Por otro lado, si bien para Jara y Yáñez no solicitó medidas de coerción por falta de antecedentes, sí lo hizo respecto a Jorge Galindo, quien presenta condenas por varios robos, además de solicitudes de rebeldía en otras causas.

La calificación legal por la que el Ministerio Público pidió la apertura de investigación es de acuerdo al delito de robo agravado por ser en poblado y en banda. Observando que estaban dadas las condiciones de una inmediata resolución del caso, pidió la realización de un juicio rápido, contando inclusive con el testimonio del encargado de ese sector. Además, se solicitó la prisión preventiva por el término de dos meses

La defensora de los tres imputados, Zulma Manyauik rechazó tal posibilidad y puso en duda la calificación esgrimida por la fiscalía, a la vez que rechazó la medida de prisión para uno de sus defendidos, ofreciendo subsidiariamente la realización de medidas sustitutivas.

Luego de escuchar a las partes la Jueza Ivana González expresó que no estaban dadas las condiciones para un juicio rápido, ya que la argumentación defensiva indicaba que la hipótesis fiscal podía ser refutada durante la investigación, de acuerdo a lo expuesto durante la audiencia. Por otro lado, consideró que el pedido de dos meses de prisión resulta excesivo para la calidad del hecho en que se involucra a Galindo, imponiendo la medida de tener que firmar tres veces por semana en la oficina de ejecución, a la vez que dispuso la apertura de investigación correspondiente, quedando los imputados en libertad.