El Ministerio Público Fiscal pidió la ampliación de apertura para la investigación respecto a hechos que involucran al policía Sergio Luis Castillo, de 43 años, quien presta servicios en la Seccional Segunda de Trelew. El mencionado es uno de los imputados en el caso por el que se encuentran detenidos cinco integrantes de la misma seccional, aunque Castillo fue impuesto de la medida de prohibición de acercamiento a la víctima y sus familiares, junto a otros tres funcionarios policiales.

  La Fiscal General Jefe, Mirta Moreno hizo saber en esta audiencia iniciada a las 15,10 de ayer, sobre las declaraciones efectuadas por un menor, que además lo reconoció en una rueda de personas, donde sindica al nombrado como presunto autor de agresión con arma de fuego. La Fiscal, acompañada por la Doctora María Tolomei, indicó que el 18 de enero de este año, cerca de las 5,45, un menor de 15 años fue demorado en la seccional segunda, siendo agredido fisicamente por varios policías.

  El jóven habría reaccionado insultando a Castillo, quien en el interior de una sala, hizo salir al resto del personal, procediendo luego a agredirlo verbal y fisicamente, tras lo cuál empuñó su arma, la cargó y le apuntó, amenazándolo: "yo soy Castillo, acá y afuera me la banco", habría expresado, retirándose del lugar.

Calificación legal

  La Fiscalía calificó el hecho como vejaciones, art. 144 bis, inciso 2do, último párrafo y amenazas agravadas, art. 149 bis, 41 bis, todos del Código Penal, en concurso real, pidiendo los plazos legales establecidos en la causa principal, cuyo expediente es el nro. 36163, estando este suceso enmarcado en el expediente 36303. A la vez se solicitó la ampliación de la prohibición de acercamiento hacia el menor y su familia.

Prohibición de acercamiento

  Posteriormente, Ministerio Público Fiscal hizo referencia a lo sucedido el día anterior, donde el imputado se acercó a los padres de la víctima del trascendente caso ya ventilado en audiencia de control, solicitando la revisión de la medida. En tal sentido se escuchó a los afectados, en primer término la madre, quien dijo que el policía se le acercó en el hall de Tribunales en forma humillante, pidiendo disculpas, dirigiéndose a su marido: "yo te conozco a vos, fuimos juntos al colegio, a su hijo nunca lo toqué", señaló la señora, quien refirió que también le recordó a ella haber sido el que le indicó preguntar por su hijo en la comisaría, cuando sucedió la detención del mismo.

  El padre del menor ratificó lo dicho por su esposa, manifestando que Castillo expresó no haber tocado a su hijo y su desacuerdo con lo hecho por sus compañeros, contando que él le respondió: " a nosotros no nos pida perdón, pidáselo a Dios". La Fiscal Tolomei afirmó que se debía dejar en claro cuando existe una medida de acercamiento, la imposibilidad de hacerlo bajo cualquier circunstancia.

Defensa

  El defensor público, Carlos Pericich negó los nuevos hechos adjudicados a su eventual cliente y justificó la situación vivida en los Tribunales, debido a la falta de previsión para evitar los contactos entre víctimas e imputados, asumiendo la responsabilidad para que esto no se repita.

Ampliación de investigación

  El Juez, José García dejó abierta la ampliación de investigación de acuerdo a los parámetros expuestos por el Ministerio Público Fiscal, mientras aseveró haber sido claro cuando dictó una prohibición de acercamiento. Dirigiéndose al imputado, agregó que siendo policía sabe como son las medidas que no son impuestas por él, sino por las normas vigentes, y si existía la intención de pedir perdón, podría haberlo realizado en la misma audiencia donde se lo imputó en aquella oportunidad, considerando esto como una última advertencia, ya que de reiterarse un acercamiento, revocará la medida y dictará la prisión preventiva.

Continúa la investigación

  Mientras tanto, se continúan efectuando diversos procedimientos, consistentes en pericias y búsqueda de testimonios, relacionados con el episodio denunciado, por el que se encuentran detenidos cinco efectivos pertenecientes a la seccional segunda de policía. Ellos son el agente Carlos Alberto Pato, el cabo Carlos Treuquil, el agente Mario Bevacua y el cabo primero Aníbal Muñoz, imputados de abuso sexual gravemente ultrajante, privación ilegítima de la libertad, vejaciones y severidades en carácter de coautores.  El otro detenido es el suboficial subinspector Adolfo Carvallo, con similares cargos aunque como partícipe necesario.

  El magistrado dispuso la libertad, aunque sometidos a proceso y con prohibición de acercamiento a la víctima, sus familiares y los testigos, del agente Víctor Ortiz y el sargento primero Sergio Castillo, imputados de vejaciones y severidades, en tanto similar medida adoptó con el oficial ayudante Bruno Rodríguez y el sargento ayudante Víctor Santibáñez por el delito de privación ilegítima de la libertad en carácter de coautores.

  En el transcurso de la investigación, donde se cuenta con la colaboración de Gendarmería Nacional, a solicitud de la Fiscalía, se efectuó el secuestro de documentación interna de la policía, se llevaron adelante allanamientos, además de contarse con los informes médicos forenses que constataron las lesiones en el cuerpo del menor. A esto se agregan las ruedas de reconocimiento y los testimonios escuchados, algunos de ellos ya como anticipo jurisdiccional de prueba, siendo considerados en tal sentido como un testimonio válido para un posible juicio oral y público.

  Los hechos ventilados en este proceso tienen que ver con los ocurridos en perjuicio de un menor de 16 años, detenido el miércoles 18 por un incidente en la vía pública.