Una audiencia de revisión solicitada por la defensa, en el marco del artículo 260 del Código Procesal Penal, permitió la resolución del Juez, Adrián Barrios, determinando una medida menos gravosa al arresto domiciliario que llevaba adelante Antonio Muñoz, involucrado en la muerte de Miguel Cayumán, producto de un disparo en una de sus piernas que le afectó una arteria femoral, en las primeras horas del 7 de julio pasado.
La Doctora María Angélica Gómez Lozano señaló que solicitaba la libertad de su cliente al ponerse en crisis la calificación esgrimida por el Ministerio Público Fiscal, lo cuál fue utilizado en su momento, tanto por el propio Juez Barrios, como por un tribunal revisor de su decisión, conformado por los Doctores García y Monti, en una revisión llevada adelante el 14 de julio, para imponer la prisión en el domicilio de un familiar.
Esa calificación de homicidio, pretendió la defensora que se coteje con la de homicidio preterintencional, artículo 81, inciso 2, lo que bajaría considerablemente la expectativa de pena, argumentando que de haber pretendido el dolo, no tendría una bala en la pierna, sino en el pecho o la cabeza, por ejemplo.
La Fiscalía, representada por el Fiscal General, Arnaldo Maza, estuvo de acuerdo en el procedimiento indicado por la defensora, pero rechazó el cambio de calificación, expresando que todo esto fue tratado por el tribunal revisor que resolvió la medida de coerción domiciliaria, a la vez que hizo conocer las medidas llevadas adelante, esperándose una pericia de ADN prevista para el 18 de agosto próximo, a lo que posteriormente se agregará un barrido químico sobre las prendas en el Instituto Balseiro y finalmente un estudio criminalístico para determinar circunstancias del hecho.
Consideró que se siguen dando las mismas condiciones con las que se impuso el arresto a Muñoz, estando acreditada su presencia donde fueron los sucesos, investigándose la participación de una tercera persona, introducida en su testimonio por el mismo imputado. Aludió a la hipótesis defensiva como meramente conjetural, ya que como se podría llegar a dilucidar si quien tiró tiene puntería o es especialista en la materia como para esperar un tiro en la cabeza o en el pecho.
Refirió a las horas de agonía que habría padecido la víctima, teniendo en cuenta que el disparo se habría producido entre la 1,25 y 1,45 , en tanto según los exámenes, la muerte habría acaecido aproximadamente a las 4. En todo caso, expuso el Fiscal, se podría llegar a pensar, siguiendo conjeturas, que hasta se lo podría acusar a Muñoz por abandono de persona con posterior muerte, con una pena mínima de cinco años, si se toma en cuenta algún testimonio que versaría sobre alguna afirmación del mencionado sobre una discusión y posterior disparo de otra persona, con él presente en el lugar.
El Doctor Adrián Barrios se tomó unos minutos para evaluar la situación y reconoció la prudencia llevada adelante por el Ministerio Público Fiscal, al requerir las pericias cuidando que los elementos no sean manipulados de maneta tal que corran riesgo de diluirse o perderse pruebas que pueden resultar importantes. Mas allá de eso, manifestó que observaba podían neutralizarse ahora los riesgos de fuga y entorpecimiento con una medida sustitutiva al arresto domiciliario, decretando la firma por parte de Muñoz del libro de la Oficina de Ejecución todos los días hábiles, y los días sábado y domingo en la seccional tercera de esta ciudad, hasta el momento de efectuar una nueva revisión, cuando estén los resultados periciales que podrían traer luz sobre las actuaciones de los involucrados.
Miguel Cayumán fue encontrado muerto en su vivienda del barrio Sarmiento de Trelew, el 7 de julio de este año, luego que la noche anterior compartiera con un grupo de personas una velada mirando un partido de fútbol. A la mañana siguiente fue encontrado con una bala en la pierna, habiéndose desangrado, y allí se encontraron elementos pertenecientes a Antonio Muñoz, a su vez indicado como el último visto junto a la víctima. Tanto es así que en la audiencia de hoy, Muñoz solicitó si se le podían devolver la libreta sanitaria y el documento que se encuentran secuestrados, al ser hallados en la casa de Cayumán al momento de efectuarse la requisa respectiva.
Una audiencia de revisión solicitada por la defensa, en el marco del artículo 260 del Código Procesal Penal, permitió la resolución del Juez, Adrián Barrios, determinando una medida menos gravosa al arresto domiciliario que llevaba adelante Antonio Muñoz, involucrado en la muerte de Miguel Cayumán, producto de un disparo en una de sus piernas que le afectó una arteria femoral, en las primeras horas del 7 de julio pasado.
La Doctora María Angélica Gómez Lozano señaló que solicitaba la libertad de su cliente al ponerse en crisis la calificación esgrimida por el Ministerio Público Fiscal, lo cuál fue utilizado en su momento, tanto por el propio Juez Barrios, como por un tribunal revisor de su decisión, conformado por los Doctores García y Monti, en una revisión llevada adelante el 14 de julio, para imponer la prisión en el domicilio de un familiar.
Esa calificación de homicidio, pretendió la defensora que se coteje con la de homicidio preterintencional, artículo 81, inciso 2, lo que bajaría considerablemente la expectativa de pena, argumentando que de haber pretendido el dolo, no tendría una bala en la pierna, sino en el pecho o la cabeza, por ejemplo.
La Fiscalía, representada por el Fiscal General, Arnaldo Maza, estuvo de acuerdo en el procedimiento indicado por la defensora, pero rechazó el cambio de calificación, expresando que todo esto fue tratado por el tribunal revisor que resolvió la medida de coerción domiciliaria, a la vez que hizo conocer las medidas llevadas adelante, esperándose una pericia de ADN prevista para el 18 de agosto próximo, a lo que posteriormente se agregará un barrido químico sobre las prendas en el Instituto Balseiro y finalmente un estudio criminalístico para determinar circunstancias del hecho.
Consideró que se siguen dando las mismas condiciones con las que se impuso el arresto a Muñoz, estando acreditada su presencia donde fueron los sucesos, investigándose la participación de una tercera persona, introducida en su testimonio por el mismo imputado. Aludió a la hipótesis defensiva como meramente conjetural, ya que como se podría llegar a dilucidar si quien tiró tiene puntería o es especialista en la materia como para esperar un tiro en la cabeza o en el pecho.
Refirió a las horas de agonía que habría padecido la víctima, teniendo en cuenta que el disparo se habría producido entre la 1,25 y 1,45 , en tanto según los exámenes, la muerte habría acaecido aproximadamente a las 4. En todo caso, expuso el Fiscal, se podría llegar a pensar, siguiendo conjeturas, que hasta se lo podría acusar a Muñoz por abandono de persona con posterior muerte, con una pena mínima de cinco años, si se toma en cuenta algún testimonio que versaría sobre alguna afirmación del mencionado sobre una discusión y posterior disparo de otra persona, con él presente en el lugar.
El Doctor Adrián Barrios se tomó unos minutos para evaluar la situación y reconoció la prudencia llevada adelante por el Ministerio Público Fiscal, al requerir las pericias cuidando que los elementos no sean manipulados de maneta tal que corran riesgo de diluirse o perderse pruebas que pueden resultar importantes. Mas allá de eso, manifestó que observaba podían neutralizarse ahora los riesgos de fuga y entorpecimiento con una medida sustitutiva al arresto domiciliario, decretando la firma por parte de Muñoz del libro de la Oficina de Ejecución todos los días hábiles, y los días sábado y domingo en la seccional tercera de esta ciudad, hasta el momento de efectuar una nueva revisión, cuando estén los resultados periciales que podrían traer luz sobre las actuaciones de los involucrados.
Miguel Cayumán fue encontrado muerto en su vivienda del barrio Sarmiento de Trelew, el 7 de julio de este año, luego que la noche anterior compartiera con un grupo de personas una velada mirando un partido de fútbol. A la mañana siguiente fue encontrado con una bala en la pierna, habiéndose desangrado, y allí se encontraron elementos pertenecientes a Antonio Muñoz, a su vez indicado como el último visto junto a la víctima. Tanto es así que en la audiencia de hoy, Muñoz solicitó si se le podían devolver la libreta sanitaria y el documento que se encuentran secuestrados, al ser hallados en la casa de Cayumán al momento de efectuarse la requisa respectiva. 
