“Lo busca lo encuentra y lo mata por la espalda”, sostuvo la fiscal María Bottini al abrir la presentación de su caso el jurado popular. Hugo Cancino, defensor de Juan Fernando Domínguez, adelantó que tratará de probar que su defendido no puede responder por sus actos debido a que se encontraba bajo los efectos del alcohol. También estarán en discusión las agravantes por las que acusó la fiscalía, el uso de arma de fuego y la alevosía, es decir que el crimen se produjo cuando Gastón se encontraba indefenso.

Todos los presentes en la sala se pusieron de pie para el ingreso del primer tribunal popular que juzga un hecho ocurrido en Esquel. El juez técnico, Jorge Criado, se dirigió al jurado para exponerle las instrucciones iniciales que guían su rol durante el debate. De este modo les habló de la prueba, de los distintos tipos de testigos, de la credibilidad de los testimonios y el análisis de estos por su coherencia interna y por su coherencia con el resto de la prueba, del rol de las partes, y de una serie de cuestiones que deben guiar la labor de los 12 jurados titulares y los cuatro suplentes.

El caso de la Fiscalía

Bottini recreó lo sucedido la noche del crimen. Relató que Gastón Gibbons tenía 26 años, cuando el 21 de noviembre de 2021, aproximadamente a las 2 am, el imputado Domínguez decidió salir a buscar a Gastón y matarlo. Momentos antes se había juntado un grupo de personas en una casa, entre ellos estaban Juan Fernando Domínguez y Gibbons. En un momento dado, Domínguez salió a comprar bebidas con el dueño de casa y las parejas de ambos. Durante su ausencia se produjo una pelea entre el hermano de Domínguez y Gastón. Por ese motivo Gastón decidió irse de la casa. Se fue caminando. Al regresar Domínguez le contaron de la pelea que se había producido entre Gastón y su hermano. El imputado decidió buscar a Gastón. Fue en el auto junto con otro joven. Al encontrarlo, detuvo el vehículo, se bajó, discutió con Gastón, este se dio vuelta y se fue corriendo. El acusado lo siguió, sacó un arma de fuego y disparó impactando el proyectil en la espalda de Gastón. Este cayó al suelo y Domínguez lo golpeó en la cabeza. Luego se retiró en el mismo vehículo y relató que le había pegado un tiro a Gastón y que le había pisado la cabeza. El joven que circulaba con él al escuchar le avisó a un vecino lo sucedido y le pidió que llame a la ambulancia.

La Fiscalía calificó el hecho como constitutivo de homicidio agravado por uso de arma de fuego y alevosía. El arma, pese a la intensa búsqueda, nunca fue hallada. Bottini anticipó que prestarán declaración los padres de la víctima, las personas que estuvieron en el encuentro previo, la policía que intervino al tomar noticia del hecho, policías de investigaciones, profesionales criminalistas, la médica que estaba de guardia en el hospital y el médico forense, entre otros testigos.

El caso de la Defensa

El defensor particular Hugo Cancino, adelantó que tratará de acreditar que esa noche hubo un gran protagonista, el alcohol. La defensa considera fundamental este elemento para decidir sobre la responsabilidad del imputado. Sostuvo que una persona puede llegar a realizar una serie de actos bajo el efecto del alcohol. “Vamos a ver si podemos acreditar que en este caso, fue el factor determinante para que esto que sucedió tenga una razón de justificación de la conducta que tuvo mi defendido”, dijo Cancino.

La teoría de la defensa es que se trató de un homicidio sin los agravantes que plantea la fiscalía y que Domínguez actuó bajo los efectos del alcohol, lo que atenúa su responsabilidad.