Tras el juicio oral llevado adelante en la sala de la Cámara del Crimen, ubicada en el sexto piso del edificio de tribunales en Trelew, Rubén Antonio Valdez, alias “el flaco”, fue declarado culpable por el delito de homicidio simple, agravado por el uso de arma de fuego, en el marco de los artículos 79, 41bis, 42 y 45 del Código Penal, en un hecho ocurrido el 5 de noviembre de 2013, donde resultara víctima Josel Yamil Herrera y el tribunal, integrado por los doctores Alejandro Defranco, José García y Marcelo Niero Di Biase, impuso una pena de diez años y ocho meses de prisión
El Ministerio Público Fiscal, representado por la fiscal general Mirta Moreno, pudo acreditar en el transcurso del debate la materialidad de lo ocurrido y la autoría de Valdez, probando que aquel día, cerca de las 18, Herrera se apersonó en el domicilio de la pareja del imputado, generándose una discusión, para luego Valdez, portando un arma de fuego y conociendo el poder vulnerante del elemento que llevaba consigo, sabiendo lo que hacía y con la inequívoca intención de dar muerte a la víctima, extrajo el revólver calibre 22 y sin mediar reparo alguno efectuó dos disparos hacia la integridad física de Yamil Herrera.
Uno de los proyectiles impactó en la zona de la cara anterior del tórax, causándole la muerte por paro cardiorrespiratorio a escasos minutos, logrando recorrer el fallecido una distancia aproximada de 70 metros, llegando a la esquina de Pascual Daleoso y Lago Puelo, lugar donde finalmente cae produciéndose su deceso. Ante lo mencionado, Rubén Valdez junto a su pareja, a los fines de evitar ser aprehendidos se ocultan rápidamente en el interior de su domicilio.
Una vez constituído el personal policial de la seccional tercera de Trelew, junto a la división de investigaciones judiciales comenzaron las primeras tareas investigativas, logrando dar con testigos presenciales del hecho, razón por la cuál se efectuó la diligencia de allanamiento en la morada sita en la calle Lago Rosario del barrio Amaya, lugar en la que se encontraba oculto Valdez, lográndose de esta manera aprehenderlo y, secuestrándose el revólver calibre 22 que fuera utilizado por el mismo para ultimar a Yamil Herrera.
Tras la presentación de las partes de los testimonios convocados y los informes periciales pertinentes, el cuerpo colegiado dió a conocer el veredicto mediante el cuál resolvieron por mayoría la culpabilidad de Valdez, de acuerdo a la calificación esgrimida por la fiscalía. El doctor Defranco comunicó que su voto fue en disidencia en cuanto al grado del delito, situación que fundamentará en la sentencia.
Prisión preventiva
En la cesura de pena, evaluándose los atenuantes y agravantes, el Ministerio Público Fiscal había solicitado una pena de quince años de prisión, en tanto la defensa, ejercida por Angela Gómez Lozano pidió ocho años, fijando finalmente los magistrados la sentencia de diez años y ocho meses de prisión, además de resolver la continuidad de la prisión preventiva del encartado, hasta tanto sea confirmada, teniendo en cuenta los plazos existentes para los procedimientos recursivos de las partes.
