Raúl Sergio Huincaleo era un joven de 22 años, padecía alguna discapacidad menor por lo que concurrió como alumno a escuelas especiales, y ayudaba a su familia trabajando de ayudante en la construcción junto a su padre. Aquella tarde del 17 de noviembre de 2014 decidió salir de su casa, donde residía con sus progenitores, dirigiéndose en primera instancia a visitar a un familiar en el barrio Vepam, para posteriormente ir a varios lugares, entre ellos la plaza centenario y el anfiteatro de la laguna Chiquichano, donde acompañado por un primo bebieron cerveza.
Este fue el origen de los hechos que llevaron a Huincaleo hasta un final imprevisible, por lo que hoy están siendo ventilados en juicio oral y público que se efectúa en el sexto piso de los tribunales de Trelew, donde están acusados Alejandro Morales, alias “fiti”, y Víctor Traipe, apodado “lagarto”, por homicidio simple en carácter de coautores, artículos 79 y 45 del Código Penal.
La fiscal general María Tolomei expresó en el comienzo del debate que se demostrará el modo cruel y los motivos absurdos que llevaron a la muerte de Raúl, el 18 de noviembre del año pasado, entre las 0,30 y 1, en una zona que abarca la calle Alem norte, entre Cipoletti y Evans, donde la víctima fue atacada por los imputados Relató que tanto Huincaleo como su primo habían estado acompañados por otro amigo que posteriormente los abandonó para ir a trabajar, pero convocaron a una chica junto a quien fueron a comprar mas bebidas a un sitio clandestino del barrio Don Bosco, cruzándose en el camino con tres individuos que venían en sentido contrario, y es allí donde la víctima choca una de sus hombros con dos de ellos, los que comenzaron a proferir insultos y amenazas, iniciando además una persecución por arterias del sector.
Morales y Traipe, y la otra persona, persiguieron a Huincaleo, quien separándose de sus acompañantes, intentó evadirse, pero finalmente fue alcanzado, siendo golpeado con piedras y todo tipo de golpes. Ya en el piso e indefenso, el agredido gritaba: “perdón, perdón…”, mientras Morales golpeándolo le manifestaba: “pensabas que no te íbamos a matar…”, y extrajo un cuchillo con el cuál le asestó un puntazo en el tórax. Una vez boca abajo Huincaleo recibió dos estocadas en el muslo, al tiempo que Traipe le golpeaba la cabeza, intentando defenderse con patadas, las cuales eran respondidas por Morales con mas puñaladas.
Quien iba acompañando a Morales y Traipe en la corrida que sirvió para encerrar a la víctima, observó toda la agresión a cercana distancia, y al ver la violencia ejercida les gritó: “paren, paren, ya está…”, retirándose mas tarde los tres en dirección a laguna Chiquichano, dejando tirado a quien resultó afectado. En el trayecto vuelven a encontrarse con los que habían salido a beber con Huincaleo, quienes al verlos se separan y comienzan a correr, ante el temor de ser agredidos, siendo uno de ellos perseguido para luego perderlos de vista.
Para corroborar los hechos, la doctora Tolomei expone desde el lunes durante el evento las pruebas testimoniales y documentales, basándose en testigos directos que permitieron la descripción fiel de todo lo sucedido y la intervención policial correspondiente, contándose además con la declaración realizada por quien acompañaba a los acusados y los dichos de estos últimos efectuados en diferentes audiencias realizadas durante el proceso hasta llegar a juicio.
La defensora de “lagarto” Traipe, María Angélica Gómez Lozano, intenta probar que a su cliente le cabe el mismo sobreseimiento que a quien acompañaba a los dos sindicados como sospechosos del homicidio, en tanto la defensa de “fiti” Morales, ejercida por Juan Salgado, manifestó que mas allá de lo que pueda llegar a probarse, su defendido no recuerda lo sucedido, habiendo estado en su momento alejado de la comprensión de sus actos, debido al estado de alcoholismo grave y absoluto. Intenta justificar su accionar indicando que sufre adicción también a sicofármacos, problemas éstos que serán presentados para su defensa en el caso.
Los jueces José García, Ana Laura Servent y Marcelo Di Biasse son los integrantes del tribunal que durante esta semana escuchan los testigos ofrecidos por las partes, previéndose que en la jornada de hoy se culmine con la deposición de los mismos, para proceder luego al ofrecimiento de prueba documental, estimándose que la próxima semana podrán escucharse los alegatos
