Se realizaron más de 20 allanamientos, varias requisas vehiculares y se pudo secuestrar cantidad de elementos vinculados a la caza furtiva en la región. La investigación que lleva a cabo la oficina Fiscal de Lago Puelo en forma conjunta con la División de Seguridad Rural El Maitén, permitió identificar a personas que operarían entre Chubut y Río Negro. Se secuestraron 48 armas de fuego y numerosos elementos vinculados a los delitos que se investigan.
Los investigadores reunieron evidencias del traslado de cazadores desde otras ciudades, guiados por residentes de la zona. Para corroborar esta información se intensificaron los controles en coordinación con la Comisaría 73 de Ñorquinco y el Grupo de Operaciones Rurales (G.O.R.) de la policía de Río Negro. Estas acciones conjuntas se enfocaron en las rutas provinciales 6 y Nacional 40, vías de acceso frecuentes para cazadores que se dirigen a la zona de Chubut Arriba, en territorio rionegrino, donde se estaría realizando la caza ilegal de ciervos en campos ocupados por comunidades originarias.
En diferentes operativos se constató la llegada de personas desde La Pampa y Puerto Madryn, con armas de fuego de repetición de distintas marcas y modelos. Se dirigían a un campo en El Maitén. En el vehículo que traía personas de Puerto Madryn viajaba un hombre que ya fue investigado por la caza ilegal, al que el año pasado se le secuestró una cabeza de ciervo. El informe de la División de Seguridad Vial concluye que se observa un incremento significativo en la caza furtiva, motivada por un rédito económico, que vulnera la propiedad privada al realizarse sin autorización y que afecta la fauna autóctona.
Como resultado de las investigaciones, se llevaron a cabo 20 allanamientos y se requisaron varios vehículos, lográndose el secuestro de un importante número de elementos vinculados a la actividad ilegal: 48 armas de fuego, 60 trofeos de caza, 4500 cartuchos, más de 1000 kg de carne, heladeras y freezers, varias cornamentas, 5 vehículos y teléfonos celulares. El Fiscal Jefe, Carlos Díaz Mayer y el jefe de la División de Investigaciones Rurales, Comisario Mayor Jorge Rafael Calderero, estuvieron presentes en diez allanamientos.
Las personas identificadas están siendo investigadas por caza ilegal o furtiva en infracción a la Ley 22.421, falsificación y uso de documentos falsos o adulterados, y tenencia ilegal de arma de fuego por carecer de la autorización legal y no estar registrados como legítimos usuarios ante la ANMaC. La investigación, dirigida por el Fiscal Jefe, Carlos Díaz Mayer continúa abierta y no se descartan otras posibles conductas delictivas que puedan surgir de los allanamientos realizados.