Ayer se dio lectura a la sentencia absolutoria de  Rolando Damián Muñoz (29),  acusado por el delito de tenencia de arma de fuego de uso civil, sin la debida autorización, por el cual el Ministerio Publico Fiscal, había solicitado una pena de dos años de prisión. En el fallo explicado por el  Juez Dr. Alejandro Rosales, entre los diversos considerandos, sostuvo que no advertía que el accionar del acusado fuera dirigido con intención de perjudicar un bien jurídico. Cabe recordar, que en el acta policial firmada por uno de los policías, que fue testigo en el juicio, señalaba que el acusado había tenido el arma en manos y luego se la había entregado a un menor de edad, quien la guardo en su cintura, de donde fue retirada por el mismo oficial. En tanto, durante la audiencia de debate, el  mismo uniformado indico que observo a Muñoz con el revolver, quien se lo dio un joven al que no pudo identificar y finalmente el arma quedo en posesión del menor. En este contexto, el magistrado resolvió absolver de culpa y cargo, a Rolando Damián Muñoz, en orden al delito de tenencia de arma de fuego de uso civil, sin la debida autorización, por la aplicación del principio de la duda. Los Hechos Los hechos que se le atribuían al  imputado,   se registraron el 03 de febrero del 2008, aproximadamente a las 06:00hs, en el exterior del local bailable “La Gota Fría”, ubicado en la calle Argentina Nº 694, en el barrio Parque 21 de junio, ocasión en que un grupo de jóvenes, que se hallaban reunidos en el lugar, fueron protagonistas de una pelea. En un momento de la reyerta, Leandro “Mono” Ponce (fallecido), que portaba un arma de fuego, efectúa un disparo, contra Uriel Muñoz, sin provocarle lesiones. El personal policial, que se encontraba en el interior del local bailable, al escuchar la detonación, sale al exterior y observa que se produce un forcejeo entre los integrantes del grupo, quedando el arma en poder de Rolando Muñoz, quien luego logra darse a la fuga. Los mismos protagonistas, se reagrupan en las inmediaciones y finalmente, el arma queda en poder de un menor de edad, quien se la había colocado en la cintura y allí es secuestrada por la policía. En el procedimiento, se verifica que se trata de un arma revolver calibre 22 largo, marca Taurus, color negro. Posteriormente, la investigación de la Fiscalia, permitió acreditar, que el arma en cuestión, se encontraba registrada a nombre de Lucero Argentino Hernández, y que la misma, había sido sustraída de su vivienda, el día 24 de enero de 2008.