En horas del mediodía, el tribunal de enjuiciamiento integrado por los doctores Adrián Barrios, Darío Arguiano y Marcelo Nieto Di Biasse, impusieron la pena de prisión perpetua a los tres policías encontrados culpables de homicidio calificado, artículo 80 inciso 9 del código penal, por el hecho ocurrido el 5 de septiembre de 2010 en Trelew, que costara la vida al joven Julián Antillanca.
La lectura se efectuó en la sala de audiencias de la cámara del crimen, ubicada en el sexto piso de tribunales, donde se desarrolló el juicio oral y público. Se contó con la presencia de Carlos Sandoval, el comisario acusado de encubrimiento agravado, quien recibió una pena decidida por mayoría, de tres años de prisión en suspenso y el mismo tiempo de inhabilitación para ejercer funciones públicas.
Acompañando a Sandoval se encontraba el defensor Gustavo Castro, en tanto por el Ministerio Público Fiscal se hizo presente la fiscal general María Tolomei, concurriendo además los padres de la víctima, quienes fueron querellantes en este debate. Por expresa voluntad manifestada a través de la defensa, no estuvieron en la sala Solís, Abraham y Córdoba, quienes están alojados en la alcaidía policial.
Cabe recordar que durante el juicio, la imputada Gabriela Bidera se acogió a la suspensión del juicio a prueba, resolviéndose que realice tareas comunitarias en una institución de Puerto Madryn, ciudad donde reside. Por otro lado, resultó absuelto por el delito de homicidio calificado, el restante acusado, Pablo Morales.
Ante la solicitud de las partes, los jueces hicieron leer la parte resolutiva, señalando que las fundamentaciones de cada uno de los votos se entregará a las partes, aclarando que las mismas tienen una extensión de ciento ochenta carillas. La sala permaneció ocupada por allegados a los padres de Julián, que por otro lado, fueron acompañados permanentemente durante el transcurrir del juicio por integrantes del servicio de asistencia a la víctima del delito (savd).
Mas allá de la confirmación de las penas por parte del tribunal de enjuiciamiento, vale destacar que corren los plazos para las instancias recursivas, donde las partes pueden apelar, antes que las mismas se consideren firmes.