De acuerdo a lo que había determinado el Juez José García en la audiencia desarrollada el 16 de enero, la defensa de Jorge Oscar Muñoz, ejercida por el abogado particular Abdón Manyauik, presentó un informe social y condiciones habitacionales del domicilio donde el imputado cumpliría el arresto domiciliario, requisitos indispensables para conceder tal medida, adelantada en su momento por el magistrado.

  En esta ocasión, el Juez Fabio Monti, determinó la medida solicitada, a partir de lo resuelto en su momento por su colega, y a instancias del Ministerio Público Fiscal, representado por el fiscal general Omar Rodríguez, impuso la vigilancia y rondines sorpresivos de agentes pertenecientes a la jurisdicción donde se encuentra la vivienda, disponiendo además la responsabilidad por lo que pudiera suceder en dos familiares de Muñoz, quien podrá trabajar como mecánico en el mismo sitio, respondiendo a una necesidad de mantención para su familia, según lo informó el defensor.

  Jorge Oscar Muñoz, 33 años, está  presuntamente implicado en el robo perpetrado en el cajero del supermercado Carrefour, ubicado en 25 de mayo entre Corrientes y México de Trelew,  hecho ocurrido el 6 de septiembre de 2012 , por lo que permanece con medida de coerción, situación revisada en la audiencia llevada adelante en el tercer piso de tribunales. 

      La detención de Muñoz, alias "pichalao", se produjo luego de un seguimiento tras producirse el hecho entre las 23 del 6 de septiembre de este año y la madrugada del día siguiente. En aquellas circunstancias, según el relato del fiscal, habrían ingresado tres personas armadas, entre ellas el imputado, quienes permanecieron en un sector de mueblería, para actuar luego en el primer piso, donde cubriéndose los rostros amenazaron y sometieron al empleado de seguridad, a quien trasladaron y ataron en el baño de damas, dejándolo bajo vigilancia de uno de los actuantes.

  Luego procedieron a llevar adelante tareas en el sector del cajero, para lo que habrían utilizado diversas herramientas, entre ellas una maza y un taladro, logrando destruir el sistema de alarmas allí dispuesto. Una vez que accedieron al depósito, se hicieron de aproximadamente 653.400 pesos.

  El hecho fue calificado como robo agravado por el uso de arma en poblado y en banda, artículos 166, 2do. párrafo en concurso con el 167, 2do y 3er párrafo del Código Penal, en calidad de coautor.

  El Ministerio Público Fiscal está próximo a presentar la acusación que pesa sobre el imputado, por lo que se pueden neutralizar los riesgos procesales argumentados para su detención con el arresto domiciliario, habiéndose tomado la mayoría de las medidas tendientes al avance de la investigación. Por este motivo, el doctor García había pedido se cumplan los requisitos necesarios para determinar la morigeración, situación que fue aceptada ahora por el magistrado subrogante, Fabio Monti.