Durante una audiencia de apertura de investigación, realizada en sala de oficina judicial ubicada en tercer piso de tribunales en Trelew, el Ministerio Público Fiscal representado por el fiscal general Enrique Kaltenmeier y la funcionaria de fiscalía Verónica Fabris, imputó a un joven que hoy tiene 21 años un grave delito de abuso sexual ejercido en perjuicio de una menor.

Los hechos habrían ocurrido entre los años 2015 y 2017 en circunstancias que el imputado aprovechaba cuando la menor acompañaba a su madre en momentos que acudía asiduamente al domicilio donde residía el mencionado junto a su mamá. Cuando ambas madres salían, situación que era muy frecuente, la menor que contaba con ocho y nueve años de edad, era sometida sexualmente.

Los   hechos imputados se ajustan, en esta instancia, a la calificación jurídica de abuso sexual simple, en concurso real con abuso sexual con acceso carnal (en la modalidad de delito continuado), que se imputan   como   autor de   los   mismos, arts.   119, párrafos 1°   y 3° -texto según Ley 25087-, 45 y 55 del código penal.

Cabe destacar que el imputado resultaría ser menor de edad al momento de los hechos, y esta fue la argumentación esgrimida como atenuante por el defensor Martín Castro quien ejerce el asesoramiento legal junto a Rodrigo Miquelarena. Por otra parte, se presentó como querellante patrocinadora la doctora Gladys Olavarría, que estará acompañada por Paula Farías, en representación de la madre de quien resultara víctima, que estuvo presenciando la audiencia a través de videoconferencia.

El Juez Marcelo Nieto Di Biase evaluó los elementos presentados por la parte acusadora y tuvo en cuenta las medidas solicitadas que deberán efectuarse en forma inmediata, y dispuso la medida de coerción del imputado, consistente en el arresto domiciliario con uso de tobillera electrónica por el término de un mes y medio, al considerar la gravedad del hecho y la existencia del peligro de fuga. Dispuso además medidas de prohibición de acercamiento para el hermano del imputado, ya que habría ejercido ciertos actos de entorpecimiento hacia familiares de la víctima. Ordenó que de no haber existencia de tobillera, se efectúen rondines policiales varias veces por día en el domicilio donde quedará alojado el presunto abusador.