El Ministerio Público Fiscal, representado en la audiencia de control por el funcionario de fiscalía Enrique Kaltenmaier, expuso sobre la imputación que le endilga a una persona que fue recientemente detenida y habría participado en un violento robo ocurrido en zona de chacras sobre ruta 7 en el mes de noviembre del año pasado. La referida audiencia tuvo lugar en sala de oficina judicial, tercer piso de tribunales, a cargo del Juez Marcelo Nieto Di Biase y la defensa del abogado Abdón Manyauik.
Durante su desarrollo el funcionario de fiscalía indicó que el imputado fue detenido por otro hecho, pero tenía orden de detención desde el 27 de noviembre de 2017, debido a un hecho ocurrido el día anterior cerca de las 21,50 cuando una familia, constituída por un matrimonio y varios chicos, llegaba a su domicilio situado en la mencionada chacra. Una vez en el interior, mientras se disponían a ordenar luego de haber efectuado compras, el padre salió para dar comida a los perros cuando es sorprendido por cuatro sujetos portando cada uno armas de fuego: una escopeta, una escopeta recortada, un arma calibre 38 y otra tipo 9 milímetros. Todos vestían como policías, incluyendo chalecos antibalas y guantes, además de comunicarse con el exterior a través de un handy.
Con el hombre de rehén, ingresaron al interior y ataron con alambre al matrimonio mientras hicieron que permanezcan todos juntos en una de las dependencias. Luego revisaron toda la casa y se fueron apoderando de diversos elementos, entre ellos un televisor, impresora, notbook, prendas, electrodomésticos, GPS, teléfono celular y hasta la llave de un automóvil que finalmente no pudieron arrancar. El martirio para el grupo familiar duró aproximadamente dos horas y presumen que los intrusos debieron haberse ido en un vehículo, llamando la atención que insistían sobre la existencia de un auto blanco, que sospechan era el perteneciente a uno de sus hijos mayores que no se encontraba en el lugar.
La calificación esgrimida por el Ministerio Público Fiscal es robo doblemente agravado por haber sido cometido empleando armas de fuego, además de ser en poblado y en banda, en carácter de coautor, artículos 164, 166, 167, 45 y 55 del código penal. Se solicitó la apertura de investigación por seis meses, quedando a cargo la fiscal general María Tolomei. Por otro lado, el doctor Kaltenmaier pidió la prisión preventiva hasta la audiencia preliminar, detallando las características graves del hecho que reafirman el peligro de fuga y también el entorpecimiento, ya que testigos deben reconocer en rueda al imputado y objetos encontrados en un allanamiento efectuado en su vivienda.
Según lo relatado, el ahora detenido fue reconocido en forma instantánea durante el suceso por una de las víctimas, con la que se mostró muy agresivo, tal vez por esta razón. La expectativa de pena va de 3 a 10 años, estimándose que será mas del mínimo y de efectivo cumplimiento, y además tiene antecedentes con una sentencia condenatoria del año 2010 cuando se le impusieron cuatro años de prisión.
El defensor señaló que no se opondría a la apertura de investigación, pero a la vez pidió que se tenga en cuenta lo que pudiera surgir de los reconocimientos solicitados por la fiscalía. En ese sentido, el Juez Marcelo Nieto Di Biase impuso una prisión de quince días y se revise la situación del imputado, a partir del reconocimiento de persona y también de objetos que deben efectuar los afectados, determinando la apertura de la investigación correspondiente de acuerdo a la calificación fiscal.