Luego de finalizada la última jornada del juicio oral y público por el hecho contra la propiedad acontecido el pasado 25 de febrero de 2009 que tiene como imputado a José Luis Navarrete, el tribunal colegiado resolvió por unanimidad condenarlo a la pena de cinco años de prisión de cumplimiento efectivo al encontrarlo responsable del delito de robo con arma. El tribunal no hizo lugar a la solicitud del fiscal general, sobre la aplicación de la prisión preventiva, aplicando en su reemplazo medidas sustitutivas hasta tanto la sentencia quede firme.

En la audiencia de cesura o imposición de pena se escuchó la palabra de la pareja del imputado quién relató particularidades de la familia; y luego el testimonio de la madre de Navarrete quién refirió una infancia dura, con un padre alcohólico y golpeador.

Seguidamente el fiscal solicitó al tribunal se lo condene a la pena de seis años de prisión teniendo en cuenta las pautas mensurativas, objetivas y subjetivas, establecidas en el Código Penal. Para ello tuvo en cuenta la modalidad del hecho y las características del mismo. También solicitó la prisión preventiva para Navarrete al entender que existe peligro de fuga, por la sentencia condenatoria y porque ha quedado acreditada, la participación de Navarrete, en el hecho. “Existe la probabilidad razonable que el imputado se sustraiga al accionar de la justicia, violando la aplicación de la ley” argumentó Cabral.

En contraposición la defensora se opuso a la solicitud de privación de la libertad requerida por el fiscal, negando el peligro de fuga ya que su pupilo siempre se presentó a todas las audiencias, desde el inicio del proceso. Sabía la pena que le correspondía al ser declarado penalmente responsable el miércoles e igual se presentó hoy a la audiencia. Argumentó que el estado de inocencia no queda superado hasta que la sentencia quede firme, por lo cual solicitó su libertad y el mínimo de la pena establecido para el delito de robo con arma, de cinco años.

Finalmente le tribunal resolvió por unanimidad condenar a Navarrete a la pena de cinco años de prisión de cumplimiento efectivo, teniendo en cuenta como agravante la intervención de tres personas en el hecho; y como atenuantes la infancia y juventud del imputado, muy limitadas en lo educativo y laboral y la falta de antecedentes penales. No haciendo lugar a la solicitud de privación de la libertad y sustituyéndola por presentaciones periódicas ante la autoridad judicial, y la prohibición de alejarse de la ciudad sin autorización legal previa.