La familia de Nelson Trigo e integrantes de la Asociación de Víctimas estuvieron reunidos con fiscales. Se interiorizaron sobre los pasos a seguir con su caso tras la nulidad parcial de la condena de Diego Currumil.

La tarde del lunes, la viuda de Nelson Trigo, Angélica Melli, y su hijo Ezequiel, estuvieron reunidos con el fiscal jefe Daniel Báez y la fiscal Marcela Pérez. Estuvieron acompañados por el presidente de la Asociación Victimas de la Delincuencia, Ángel Gersi.

Durante casi una hora se interiorizaron sobre los pasos a seguir con su caso, luego que la Cámara Penal declarara la nulidad parcial de la condena dictada al homicida de Nelson Trigo. Desde la fiscalía se les explicó que se deberá realizar una nueva audiencia, antes tres jueces distintos, donde se deberán pedir las penas nuevamente. Aunque por jurisprudencia de la Corte Suprema de Nación basada en una doctrina del latín denominada “reformatio in pejus”, que significa “reformar en perjuicio”, tras un recurso, el tribunal encargado de dictar una nueva pena no podrá “empeorar” la dictada en la primera sentencia del condenado.

Sobre la reunión, Báez afirmó que “más allá del bochorno que implica una resolución de este tenor, lo que conlleva una gravedad mayor es la desazón de las víctimas. Porque al dolor por la irreparable perdida de un ser querido, se le suma el perjuicio que ocasiona volver a repetir una etapa del juicio y revivir una instancia que ya creían superada. De todas maneras, con mucha resignación han visto de algún modo que la tarea de los jueces de Cámara ha sido conforme a derecho, y entienden que es preferible que la misma Justicia ventile estos yerros a que “los tapen”, confirmando o revocando una pena que no los satisface”.

Diego Currumil, condenado por “homicidio simple en concurso con agresión con arma”, había sido sentenciado a una pena de 15 años. Tras la nulidad parcial dictada por la Cámara Penal en segunda instancia, la Oficina Judicial deberá fijar una fecha de audiencia para pedir penas con un nuevo tribunal.