En la sala de audiencias de la cámara del crimen, ubicada en el sexto piso de tribunales, dio comienzo el juicio oral y público mediante el cuál se juzga la conducta ejercida por Marciano Jesús Flores, acusado de haber dado muerte mediante disparo de arma de fuego a Nilda Avila, en un hecho ocurrido el 8 de septiembre de 2013 en un domicilio ubicado en el barrio Inta de Trelew.
Aquel día, hipótesis fiscal relatada por el doctor Omar Rodríguez, el imputado tuvo una discusión con su mujer en la vivienda que habitaban en el mencionado sector, subiendo el tono de la discusión, hasta tomar Flores un arma de fuego calibre 38, disparando en dos oportunidades, pudiéndose certificar un orificio de entrada y otro de salida del proyectil que dió en la humanidad de la víctima. El otro disparo fue a dar en una mesa, de acuerdo a lo que concluyeron las pericias respectivas.
El caso fue calificado por la fiscalía como homicidio doblemente agravado, enmarcado en el artículo 80 inciso 1ro y artículo 11, ambos del Código Penal, con una pretensión punitiva que alcanza la prisión perpetua. Por otra parte, se vincula el delito a la vigencia de la Ley de violencia de género, que lleva el número 26485 en su artículo 4to., argumentándose sobre las acciones que habría desarrollado en tal sentido el imputado con agresiones, amenazas y tormentos. En tal sentido, se encontraban presentes en la sala de audiencias integrantes de la cátedra sobre violencia de género de la Universidad Nacional de la Patagonia.
Antes del comienzo del debate, en una cuestión previa, el defensor Martín Castro expuso sobre la posibilidad de incorporar al ex comisario Jorge Clavel, como perito de parte en cuestiones balísticas, lo que fue rechazado por el fiscal general Omar Rodríguez, dando a conocer que la referida pericia fue realizada e informada en el momento correspondiente, no siendo este el momento de ofrecer contra prueba al respecto. Sin embargo, no puso objeciones para que el profesional ofrecido pueda actuar como asesor en algún momento del juicio, lo que también fue aceptado por el tribunal, integrado por los doctores Darío Arguiano, Fabio Monti y Marcelo Nieto Di Biasse.
La primera jornada se desarrolló de manera discontinua, debido a que el propio defensor tenía programadas algunas audiencias previas, por lo que el debate debió interrumpirse por un largo espacio de tiempo.
La mayor parte del evento estuvo ocupada por los policías que llegaron al lugar alertados por el comando radioeléctrico, quienes dieron a conocer como encontraron a la víctima y los elementos, como el arma y un cuchillo que fueron reconocidos por los testigos. Manifestaron los efectivos que existía reticencia por parte de Flores para que pudiera actuar la policía: “si no son enfermeros váyanse de acá”, habría manifestado el acusado, mientras uno de ellos expresó que la mujer pudo hablar, indicando que se había disparado, lo que luego contradijo, mientras se esperaba la ambulancia y estaba seriamente herida, al indicar que le habían disparado.
También confirmaron que el propio Flores fue detenido en esas circunstancias, y entre sus dichos habría señalado que la mujer se había disparado, pero al ser consultado sobre el arma, dijo que se había descartado de ella. Sin embargo, los testigos policiales dijeron que el arma era perfectamente visible sobre un armario del lugar, dejando actuar al personal de criminalística llegado posteriormente, tratando de preservar la escena a sus efectos.
Los últimos que depusieron fue una pareja de vecinos, separados de la casa de Flores por una pared, quienes aseveraron haber escuchado dos explosiones, no poniendo interés debido a que sucede habitualmente en los alrededores. Cuando estaban ya cenando, recibieron el pedido de auxilio del acusado, quien habría dicho: “se me escapó un disparo y le pegué…”. Ambos fueron consultados acerca del comportamiento habitual de sus vecinos, expresando que no existía mucha relación y era poco lo que se veían, aunque nunca tuvieron problemas mayores.
El juicio oral y público por la muerte de Nilda Avila continuaba hoy en su segunda jornada, donde estaban convocados peritos balísticos para dar precisiones sobre los informes que dan cuenta de la cantidad de disparos y otros elementos insertos en la investigación. Así lo dispusieron los magistrados Arguiano, Monti y De Biasse, quienes conforman el tribunal que lleva adelante el debate.