Durante una audiencia de control, un jóven de 19 años que tenía orden de captura desde el 15 de marzo, confesó haber sido el autor de dos disparos, uno de los cuales terminó con la vida de Germán Montenegro, en una zona ubicada entre las calles Nicaragua y Pecoraro Norte de Trelew. El hecho ocurrió el 7 de marzo de este año, y el imputado se entregó para someterse a la justicia, luego que el Ministerio Público Fiscal solicitara su detención, la que fue ordenada por la Jueza Patricia Asaro.

El hecho

  El Funcionario de Fiscalía, Omar Rodríguez, hizo saber que el día mencionado cerca de las 20, el ahora detenido acudió junto a un grupo de jóvenes buscando a simpatizantes de independiente que presumiblemente habían arrojado piedras contra la hermana de uno de ellos. En esa búsqueda, se encuentran con Germán Montenegro, junto a un hijo menor, que les habría dicho: "que me asustás a mi hijo", lo que provocó la reacción del imputado, quien extrajo un revólver y desde una distancia de aproximadamente entre 3 y 7 metros, efectuó dos disparos, impactando uno arriba de la ceja provocándole la muerte.

Homicidio agravado

  La calificación jurídica es la de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, arts. 79 y 42 bis, además del 45 por tener carácter de autor, previstos en el Código Penal. El doctor Rodríguez solicitó la apertura de investigación por el tiempo legal estipulado en el Código, quedando a cargo de la investigación el Fiscal General Arnaldo Maza.

  Pero además fundamentó el pedido de prisión preventiva en los riesgos procesales de entorpecimiento y fuga. En tal sentido dió a conocer los elementos colectados hasta el momento, consistentes fundamentalmente en los testimonios de quienes estaban en el lugar, uno de los cuales tiene que ver con un integrante del grupo que acompañaba al imputado en aquel momento, como así también de algunos allegados a la víctima. Consideró el Funcionario de Fiscalía que están dados elementos esenciales que dan certeza a la existencia del hecho y la participación del jóven, enfatizando para el riesgo procesal de fuga, que si bien terminó entregándose antes de ser detenido, se presentó recién el día 23 de marzo, algo mas de una semana después del libramiento de la orden de captura, previéndose la posibilidad de una futura pena que sería de diez años y ocho meses de efectivo cumplimiento como mínimo, además del daño provocado.

"Apunté y disparé"

  A instancias del defensor, Abdón Manyauik, su cliente declaró y según su versión, se encontraba aquel día en una ferretería, encontrándose luego con tres amigos, con quienes iniciaron la búsqueda de otros que habrían agredido a una allegada con un ladrillo en la cabeza. En ese menester estaba yendo y viniendo, observando a varias personas que cree haber visto bebiendo.

  "Había uno que sacó un cuchillo y andaba con un nene", manifestó el agresor, agregado que lo ve cruzar la calle con intenciones de dejar al menor. Luego dice que pasaron por ese lugar y seguían caminando, advirtiendo que uno los seguía casi a la par, mientras quien tendría ese cuchillo se le puso a unos siete metros y empieza a decir: " que les pasa con mi pibe...". Mas adelante expresó: "como yo iba último me di vuelta y quedé frente a él, lo veo con el cuchillo, saqué el arma como para asustarlo, se me venía encima y ahí le apunté y disparé, no se porque lo hice, después se me nubló todo y salí corriendo, a la vez que sentía la corrida de mis compañeros..."

  Durante la audiencia aceptó preguntas de las partes, aclarando que los otros eran como cinco y ellos unos cuatro, mencionando de quienes se trataba. También indicó que el arma utilizada es un calibre 22, el que arrojó en la corrida debajo de un auto, habiendo sido dos los disparos realizados. Además dijo estar muy asustado y que no había tomado nada.

  La Jueza Patricia Asaro resolvió la apertura de investigación por el término legal y la calificación impuesta por la Fiscalía, en tanto impuso una medida de coerción, prisión preventiva, por el término de un mes, previendo la revisión para el 23 de abril próximo, considerando que faltan implementar medidas para dilucidar totalmente el hecho, entre ellas, la ratificación de los testimonios expuestos y posible rueda de reconocimiento. Por otra parte, ordenó el cumplimiento de la prisión en una dependencia a resguardo de posibles contactos con personas cercanas a la víctima, teniendo en cuenta los hechos y amenazas, en relación con el episodio por el cuál se procedió a su detención.