Audiencia de revisión por el homicidio de Paulo Olima
En horas de la mañana del viernes se efectuó en sede de los tribunales penales del barrio Roca la audiencia de revisión y solicitud de prórroga del plazo de investigación por el hecho ocurrido el pasado 11 de diciembre de 2016 en el barrio Laprida que tiene como único imputado a Ezequiel Arrua. La funcionaria de fiscalía solicitó la prórroga del plazo de investigación y el mantenimiento de la prisión preventiva de Arrua por el término de un mes. En contraposición el defensor requirió su libertad y subsidiariamente su arresto domiciliario. Finalmente el juez penal autorizó la extensión del plazo de investigación por un mes y mantuvo la prisión preventiva que viene cumpliendo el imputado por igual término.
En un primer momento la funcionaria de fiscalía Verona Dagotto solicitó la prórroga del plazo de investigación ya que resta peritar una segunda arma blanca secuestrada en cercanías del hecho. La fiscalía ya finalizó con otras medidas de investigación pero aún resta peritar esta segunda arma blanca con rastros hemáticos secuestrada a cuatro cuadras del hecho, dentro de una rueda. Requiriendo asimismo la prórroga por un mes del plazo de investigación y el mantenimiento de la prisión preventiva de Arrua por la existencia de elementos de convicción suficientes para sostener con probabilidad su autoría, y en base a los peligros de fuga y entorpecimiento de la investigación. Peligro de entorpecimiento ya que varios testigos son personas que viven en el mismo barrio y el imputado y la víctima pertenecen a grupos antagónicos. Peligro de fuga por la pena que se espera en caso de recaer condena, con un mínimo de ocho años de prisión de efectivo cumplimiento. Respecto de la probabilidad e autoría existen testigos presenciales que ubican a Arrua en pelea con Olima aquel día. Finalmente la funcionaria hizo referencia a la causa de muerte de Olima por un shock hemorrágico irreversible producido por herida de arma blanca en el tórax.
Por su parte el defensor particular de Arrua, Guillermo Iglesias, solicitó la libertad de su asistido con prohibición de acercamiento y contacto con los testigos y la familia de la víctima y subsidiariamente su arresto domiciliario. Ello ya que a su entender las pericias que restan no van a arrojar luz sobre lo que realmente pasó aquel día. Nadie vio el preciso momento en que la víctima sufre la agresión de tres personas, sugiriendo que la calificación podría variar a homicidio en riña. No se opuso a la prórroga del plazo de investigación, pero negó la existencia de los peligros procesales de fuga y entorpecimiento de la investigación.
Por su parte el imputado accedió voluntariamente a declarar negando su participación en el ilícito, “yo no fui”, sostuvo.
Finalmente el juez penal subrogante Mariano Nicosia resolvió autorizar la extensión del plazo de investigación por un mes ya que no hubo objeción por parte de la defensa. Existen otras evidencias que dirigen la sospecha que habría sido Arrua quién provocó la lesión mortal a la víctima. Manteniendo la prisión preventiva del imputado por el término de un mes, como lo solicitara la funcionaria de fiscalía.