La investigación sigue adelante en tres líneas: casa del inicio, causas de la proliferación y vinculación del fuego a intereses inmobiliarios. Fernando Rivarola forma parte del equipo que tiene a su cargo la investigación. En diálogo con la prensa sostuvo que se está incorporando documentación importante y podría solicitarse un nuevo informe a partir de todos los datos recabados.
Sobre la segunda línea, la responsabilidad de las autoridades en la dimensión que cobró el siniestro, se avanzó mucho." Se pudo reconstruir qué organismos intervinieron, cuándo lo hicieron y con qué medios", señaló, agregado que toda la información fue suministrada sin inconveniente por los propios organismos. En ese sentido ahora los investigadores analizan el marco legal regulatorio de los responsables del Plan Nacional de Manejo del Fuego, del Plan Provincial del Manejo del Fuego y todos los organismos vinculados a la tarea: brigadas de incendios, bosques, bomberos… Pretenden establecer cuáles son sus obligaciones legales.
La información reunida da cuenta de la falta medios disponibles adecuados para enfrentar un incendio de estas características, por ejemplo no había aviones hidrantes disponibles para actuar de modo inmediato y la brigada de Cholila no contaba con vehículos.
La primer evidencia clara que observó el equipo es la falta de previsión en la zona cordillerana, en una temporada de extrema sequía y posterior a la floración de la caña con condiciones extremas de riesgo de incendios.
La semana pasada personal de la Fiscalía realizó un sobrevuelo facilitado por Daniel Wegrzyn, para reconocer la zona afectada. Wegrzyn fue entrevistado como testigo ya que conoce muy bien la zona y siguió todo el desarrollo del incendio.