La mañana del miércoles se desarrolló en sede del Ministerio Público Fiscal una reunión propiciada desde la Procuración General de la provincia, entre fiscales y jefes policiales, con el objeto de mejorar las comunicaciones en temas referidos a la preservación de la escena del crimen, la recolección de prueba, los pedidos de allanamientos y órdenes de detención de sospechosos, entre otros.
En la reunión estuvieron presentes Jorge Miquelarena, procurador general de la provincia, Emilio Porras Hernández, procurador adjunto, como así también los fiscales generales, Liliana Ferrari, Marcelo Cretton, Adrián Cabral, Cecilia Codina y Juan Carlos Caperochipi. También se encontraban presentes Edgard Alfredo, jefe de la unidad regional de policía, Cristian Ansaldo, jefe de criminalística; Leonardo Bustos, de la brigada de investigaciones; como todos los Comisarios y Subcomisarios, jefes de las distintas dependencias policiales de la ciudad.
En la reunión de trabajo se intercambiaron opiniones sobre diversas temáticas que tienen que ver con ambas Instituciones, la Fiscalía y la Policía de la Provincia. Entre los temas más trascendentes que se abordaron estuvo el de la preservación del lugar del hecho, la no contaminación del mismo y la actuación de Criminalística para la correcta recolección de pruebas. Asimismo se les consultó a los funcionarios policiales sobre la disposición de un instructivo emanado desde la procuración general, en el año 2009, con directivas específicas que tienen que ver con este tema.
En el marco de un proceso penal acusatorio, que rige desde 2006 en la provincia, “el estándar probatorio que se exige a la hora de adquirir certeza es de los más elevado y de allí que dejamos atrás los viejos procedimientos y nos abocamos a la investigación con nuevas herramientas, con bases científicas”. Es por ello que estas técnicas científicas para que tengan verdadero sustento tienen que estar adecuadamente recolectadas por el personal capacitado para ello”, aseveró el procurador adjunto. De allí la importancia de poder conversar entre los operadores, “ver donde están las dificultades y ver como poder trabajar en conjunto para el éxito de la investigación”.
Respecto de las solicitudes de órdenes de allanamiento se conversó sobre como mejorar la comunicación entre los oficiales del orden y los funcionarios judiciales intervinientes para disminuir el tiempo de resolución de las mismas. El procurador adjunto se refirió que ante el conocimiento por parte de la policía de un ilícito, su obligación es dar conocimiento al Ministerio Público Fiscal, funcionario o fiscal de turno, para que ellos tomen el control de la investigación.
Por su parte el procurador general se refirió al objetivo general de la reunión de “tratar de coordinar y aceitar el diálogo en algunas cuestiones puntuales que nos interesan a todos. Además quiero que sepan que nosotros siempre los hemos considerado parte de nuestro trabajo, al trabajo que hace policía, porque si policía hace un buen trabajo de investigación y de recolección de pruebas, a nosotros los fiscales la cosa se nos facilita enormemente, para luego canalizarlo en términos legales procesales para poder llegar a plantear un buen caso en juicio y también se le va a facilitar la tarea seguramente al juez” aseguró Miquelarena. Ya que “le va a facilitar emitir una sentencia que sea acorde a derecho”, y que va a “facilitar recomponer la paz social que todos buscamos”.
{youtube}NoEeg0Lv0SM{/youtube}
{youtube}syh00u1QqPE{/youtube}