Caso Diana Rojas: la libertad de Donnini está en manos de dos jueces de Sarmiento
El taxista Dante Donnini, acusado del femicidio de Diana Rojas, volvió a pedir su libertad mientras espera el juicio oral y público, donde lo podrían condenar a prisión perpetua. Sus abogados dicen que no se va a fugar y pidieron que lo liberen. La fiscalía y la querella se oponen. Dos jueces darán a conocer su veredicto mañana a las 8.
Puerto Madryn. El crimen de Diana Rojas espera juicio oral y público contra el taxista Dante Donnini, quien volvió a pedir quedar en libertad a la espera del debate, donde se lo podría condenar a prisión perpetua.
La suerte de Donnini (48) está en manos de los jueces Alejandro Rosales y Daniel Camilo Pérez de Sarmiento.
Estos jueces deben revisar el fallo del juez Marcelo Orlando, quien además de elevar el caso a juicio oral contra el taxista, acusado de homicidio criminis causae y femicidio, dispuso que siga en prisión preventiva hasta que se conozca el veredicto del juicio, que podría ser a mediados de año.
De ellos dependerá si Donnini espera el juicio en libertad “o en arresto domiciliario”, como sugirió su abogado defensor, Gustavo Castro. El argumento de los defensores es que el acusado del crimen no se va a fugar.
Los fiscales Daniel Báez y Jorge Bugueño, así como el abogado de la familia de Diana Rojas, Carlos Villada, se opusieron al pedido de la defensa y sostuvieron que Donnini debe seguir en prisión preventiva. Sus argumentos fueron que existen fuertes elementos que lo sindican como autor del crimen, que está previsto con prisión perpetua y que estando en libertad se podría fugar o tratar de influir en testigos.
El Tribunal, que presenció la audiencia mediante la modalidad de videoconferencia por ser de la localidad de Sarmiento, dispuso un cuarto intermedio y dará a conocer su resolución mañana miércoles a las 8 horas.
Diana Rojas fue asesinada de seis puñaladas el pasado 17 de Mayo. Su cuerpo fue oculto en un descampado cercano a la ruta 1 que une Madryn con Rawson.
Donnini está acusado de “homicidio criminis causae” y de “femicidio”, delitos que prevén una pena única, en caso de ser condenado, de prisión perpetua.
Entre las evidencias que incrimina al taxista se encuentran los exámenes de ADN, donde se halló su material genético debajo la uña de la víctima; las lesiones que presentaba el acusado al momento de ser detenido, “compatibles con rasguños”, según el forense; que tuvo en su poder el celular de Diana; y que había ADN suyo en un trapo con semen hallado en el lugar del hecho, entre otros elementos.