Los jueces Darío Arguiano y Marcela Pérez Bogado ratificaron la resolución del Juez Horacio Yangüela, y Mario Esteller continuará con el beneficio de las salidas transitorias. Es porque el juez Castro no habría dictado de forma escrita la resolución que suspende el beneficio de las salidas transitorias luego del cambio de calificación dictado por el Superior Tribunal de Justicia.
Mario Raúl Esteller fue condenado a 9 años de prisión por “homicidio simple con dolo eventual” luego de atropellar y matar a las hermanas Mónica y Verónica Sosa a la salida de un pub. Si bien esa pena fue impugnada por la defensa y un tribunal de segunda instancia cambió la calificación por una más leve de homicidio culposo, fijando la pena en 4 años de cumplimiento efectivo y diez de inhabilitación para conducir, en diciembre del 2010 el Superior Tribunal de Justicia de la provincia confirmó la sentencia dictada en primera instancia y la causa quedó con la calificación y la pena inicial.
Al respecto, Mario Esteller gozaba salidas transitorias para trabajar por haber cumplido la mitad de su condena a 4 años por “homicidio culposo”, pero luego de conocerse la sentencia del Superior Tribunal de Justicia, el juez de ejecución Gustavo Castro ordenó que a Esteller se le revocaron los beneficios de salidas transitorias al cambiar las condiciones de su condena. Pero como no constaría que el juez Castro haya dictado la resolución escrita para suspender este beneficio, el abogado defensor de Esteller, Fabián Gabalachis, presentó un recurso de habeas corpus pidiendo que Esteller sea restituido a la situación que se encontraba antes de ser detenido, es decir, que continúe con las salidas transitorias. Si bien en la audiencia realizada el día martes tanto la Fiscal Marcela Pérez como el abogado querellante Carlos Villada se opusieron a dicho pedido porque consideran que Esteller recién podrá tener el beneficio de salidas transitorias cuando haya ocurrido la mitad de su condena a 9 años de prisión, el juez penal Horacio Yangüela hizo lugar al pedido de la defensa y restituyó las salidas transitorias que gozaba Mario Esteller para trabajar y visitar a su familia.
Esa misma tarde del martes, la fiscalía y la querella impugnaron la medida y solicitaron –de acuerdo al Código Procesal Penal- que sea revisada por dos jueces. Es por ello que el día miércoles a las 10 horas se realizó una audiencia de revisión bajo la presidencia de los magistrados Darío Arguiano y Marcela Pérez Bogado. Allí, la Fiscal Marcela Pérez y el abogado querellante Carlos Villada solicitaron “que se revoque la resolución de Yangüela y se disponga la continuidad de la prisión preventiva sin salidas transitorias” afirmando que “es contrario a la lógica otorgar salidas transitorias por una pena de 4 años cuando esa pena fue revocada por la sala penal del Superior Tribunal de Justicia”. Además hicieron hincapié en que aumentaron los peligros procesales de que Esteller se fugue por existir una condena a 9 años de prisión dictada por el órgano máximo de la justicia chubutense. En cambio, el defensor particular de Esteller, Fabián Gabalachis, replicó que luego que el Superior Tribunal de Justicia ratificara el fallo de primera instancia y condenara a Mario Esteller a 9 años de prisión por homicidio simple, el juez Gustavo Castro envió un oficio para que cesen las salidas transitorias pero no realizó una resolución escrita donde disponga el cese de dichas salidas transitorias, por lo cual la detención sería ilegal y se debía hacer lugar a lo dictado por el juez Yangüela. Finalmente y tras un cuarto intermedio de una hora, los jueces Arguiano y Pérez Bogado leyeron su resolución donde afirmaron que el fallo del juez Horacio Yangüela se encontraba fundamentado legalmente y debía ser confirmado, manteniendo el régimen que Esteller goza en este momento, es decir, de salidas transitorias.
El casoLa madrugada del 21 de agosto de 2008, a la salida de un pub de la ciudad, las hermanas Mónica y Verónica Sosa fueron embestidas por la Chevy que conducía Mario Esteller a más de 80 kilómetros por hora. Esteller, que conducía en estado de ebriedad, siguió su marcha mientras la moto en la que estaban las hermanas fue arrastrada por más de 50 metros. A raíz de esto, Verónica falleció en el lugar mientras que Mónica fue trasladada hasta el hospital aún con vida, aunque falleció pocas horas después por las heridas recibidas.
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