CLAUDIO "EL CHAQUEÑO" LEZCANO FUE TRASLADADO A LA ALCAIDIA POLICIAL DE COMODORO RIVADAVIA
El ultimo sábado la policía de Sarmiento detuvo Claudio Marcelo Lezcano (41). Lo hallaron escondido en el patio de una vivienda en el barrio Buzzo. Estaba prófugo de la justicia desde el 7 de diciembre, cuando se escapo por un boquete en la comisaria de Rio Mayo.
Por pedido de la Fiscalía, el juez Daniel Pérez dispuso que permanezca alojado en la alcaidía policial de Comodoro Rivadavia. En este sentido se informo que desde la oficina judicial están agilizando los trámites para que sea trasladado a la Unidad Penitenciaria n°14 de Esquel.
En ese centro de detención deberá cumplir la pena de ocho años de prisión de cumplimiento efectivo, por ser autor penalmente responsable por el delito de robo agravado, en tres hechos.
En este contexto se debe recordar que el 7 de abril, el tribunal integrado por los jueces Roberto Casal, Jorge Criado y Daniel Pérez, le había impuesto esa condena. Asimismo, los magistrados lo declararon reincidente por primera vez.
EVASION
En la sala de audiencias de la oficina judicial se desarrollo una audiencia de control de la detención y formalización de la investigación preparatoria de juicio, contra Claudio Lezcano.
El acto judicial fue presidido por el juez Daniel Pérez. El Ministerio Publico Fiscal estuvo representado por la funcionaria Marisol Sandoval. El detenido, en tanto, fue asesorado legalmente por el Defensor Publico Gustavo Oyarzun.
En la oportunidad, Sandoval indico que los hechos a investigar se registraron el 7 de diciembre en la comisaria de Rio Mayo ubicada sobre la calle 25 de mayo y Sarmiento de esa localidad.
En esa dependencia, en el sector de celdas se constato que el imputado había realizado un boquete por el que se dio a la fuga. Todo ocurrió antes de las 05:35.
La funcionaria sostuvo que la damnificada por este delito es la administración publica. La calificación legal provisoria escogida por los investigadores fue la del delito de evasión. Para investigar el hecho, solicito un plazo de cuatro meses.
A su turno, el defensor público no objeto la detención de Lezcano y tampoco se opuso a los pedidos de la Fiscalía.
En este marco, el juez Pérez solicito al comisario Germán Lagos-presente en la audiencia- que relatara como fue el procedimiento de detención.
El funcionario policial explico que el ultimo sábado recibieron un llamado telefónico a la comisaria, mediante el cual un vecino alertaba que había observado al prófugo en el patio de una vivienda, ubicada sobre la calle Coya, del barrio Buzzo.
Hasta ese lugar se dirigieron en el auto particular del jefe de la comisaria, junto a la oficial principal Alejandra Medina y el suboficial mayor Miguel Cabezas. Lezcano no ofreció resistencia al momento de ser detenido.
Por este accionar el magistrado enviara un oficio a la Jefatura de Policía de la provincia de Chubut, a los fines de resaltar la tarea desplegada por empleados policiales de Sarmiento.
Finalmente, el juez hizo lugar a los pedidos de la Fiscalía y dispuso que Lezcano quede alojado en la alcaidía de Comodoro Rivadavia. Asimismo informo que continúan tramitando su traslado definitivo a la U14 de Esquel.
LOS HECHOS
Durante el mes de abril, Lezcano fue llevado a juicio oral y público, por una acusación de robo agravado en tres hechos.
El primer hecho, se registro el sábado 8 de junio del año 2013, a las 21:30 en la despensa ubicada sobre la avenida 9 de julio y calle Argentina, del barrio 21 de junio.
Ese día, el imputado habría ingresado al local y luego de sacar un cuchillo, amenazo a la dueña del negocio y a una empleada, exigiéndoles que le dieran dinero.
Las víctimas, le entregaron una suma cercana a los 700 pesos. Lezcano les dijo que además tenia hambre y se llevo una bolsa de sándwiches de miga.
Asimismo, las mujeres denunciaron que el asaltante las amenazo diciéndoles "si me denuncias o llamas a la policía, te voy a hacer mierda". Antes de irse, corto el cable del teléfono fijo, y se llevo un teléfono celular y plasticola de colores.
Dos días después, aproximadamente a las 20:00 horas, Lezcano regreso a la despensa "9 de julio" y nuevamente amenazo a la propietaria, obligándola a que le entregue el dinero de la recaudación , cigarrillos Malboro y maquinas de afeitar.
Cuando se retiro del comercio, le manifestó a la víctima, "la próxima vez, voy a venir y si hay gente, yo te voy a decir lo que necesito y vos lo vas a poner adentro de la bolsa, sin decir nada".
En tanto, el 18 de junio, a las 19:00 horas, ingreso a la despensa "2 de abril", ubicada en el barrio 21 de junio, y esgrimiendo un cuchillo, amenazó a la propietaria y se llevo 1000 pesos de la caja registradora.
ANTECEDENTES
Marcelo Lezcano, había sido condenado en el año 2008, a la pena de cinco años y medio de prisión de efectivo cumplimiento, luego que fuera hallado autor penalmente responsable del delito de robo agravado por el uso de armas, por un hecho ocurrido el 13 marzo de 2008.
En tanto, en el año 2007 recibió una condena de tres años de prisión , por el delito de lesiones graves.
Las coincidencias con los últimos hechos por los que se lo investiga, es que sus víctimas fueron mujeres adultas mayores y también utilizo un cuchillo para amenazarlas.
En el robo de marzo del 2008, Lezcano ingreso en una vivienda ubicada sobre la calle 28 de julio entre General Roca y Sarmiento, donde vivían dos mujeres solas.
De acuerdo a la investigación, Lezcano entro al patio de la vivienda, previo escalar un muro de dos metros de altura. Luego se introdujo al interior de la misma, por una ventana.
Una vez adentro de la casa y blandiendo un cuchillo, hizo saber a las víctimas que se trataba de un asalto. Les dijo “ esto es un asalto......quiero la plata” y coloco el cuchillo en el cuello de las víctimas.
Posteriormente intento atarlas. Una de las víctimas, intento defenderse y le arrojo insecticida en la cara. El asaltante, reacciono golpeándola en la cara.
Finalmente, logro apoderarse de 1500 pesos que se encontraban debajo del mantel de la mesa del living. También se llevo 270 pesos, que una de las mujeres le entrego de su billetera.
Antes de retirase del lugar, corto los cables de los teléfonos, para impedir que las victimas pidieran ayuda.