No se hizo lugar a la incorporación de nueva documentación
En una nueva jornada de la Audiencia Oral y Pública que investiga probables maniobras fraudulentas contra el Banco del Chubut S.A., se hizo presente como testigo, el señor Juan Pavka, actual empleado bancario con cargo en la subgerencia general, habiendo ingresado a la entidad en 1987 en Esquel, cumpliendo funciones en años posteriores en la zona de Lago Puelo y El Hoyo, siendo trasladado en 1998 a la gerencia general de Comodoro Rivadavia hasta finales de 2001, cuando comenzó a desempeñarse en la gerencia comercial de casa matriz, para mas adelante ser adscripto a funciones en la gerencia general. En primer término interrogó la querella representante del Banco, a través del Doctor Mariano Silvestroni, particularizando en la labor del testigo en Comodoro Rivadavia, en la época que se concedió un crédito por 270 mil pesos a Oscar Palavecino. En ese sentido, Pavka indicó que en esos momentos el gerente de aquella sucursal era Fernando Vidal, y sostuvo que la atención brindada a Palavecino tuvo que ver con las instrucciones recibidas desde casa matriz en la persona de la contadora Silvia Beros. Sobre el crédito mencionado, expresó haberse otorgado tomando como prenda la propia planta de procesamiento de harina de pescado, aunque ante preguntas realizadas por Fiscalía dio a entender que su valor había sido tasado en 150 mil pesos, es decir menor a lo acreditado, aunque se ofrecía también como garantía capital de trabajo. De todas maneras, el deponente aclaró que el participó y observó la documentación respectiva desde la parte comercial, siendo Palavecino un cliente recién vinculado con el Banco que efectuó un flujo de fondos, no pudiéndose apreciar su sustentabilidad o solvencia. Ese crédito, según dichos de Pavka, debía emitirse de esa manera, de acuerdo a las instrucciones recibidas de casa matriz, por lo cuál se acreditó en una cuenta interna del banco, procediéndose luego a cancelar una deuda de Geosur S.A., es decir que debía ser imputado a una deuda de casa matriz en situación irregular. Por otra parte, indicó que nunca se canceló y el Banco tuvo que rematar la planta, afirmando que no era normal un procedimiento de tal naturaleza en Comodoro Rivadavia. Ante otras preguntas, dijo que cuando llegó a cumplir labores en casa matriz, la empresa Tecneco tenía un endeudamiento importante, pero era asistida con operaciones de todo tipo. Refiriéndose a este tema, manifestó que al 3 de enero de 2001 el saldo deudor ascendía a unos 5 millones de pesos. En relación a los hermanos Fernándes dijo que los observaba en forma permanente en el Banco y contó sobre un episodio, donde se daban las condiciones para el rechazo de cheques de sus cuentas, y al no encontrarse el gerente comercial, decidió consultar sobre el proceder al respecto. En ese momento estaba el vicepresidente a cargo de la presidencia, Mario González, quien envió la respuesta que debía hacerse lo que correspondiera en cuanto a esos cartulares. La conulta, agregó Pavka, se debió a que estaba sobrepasada la calificación del cliente, en cuanto a los límites permitidos, tomando finalmente la decisión de rechazarlos, pero creo que los recuperaron al día siguiente.. “El grado de endeudamiento era tal que no podíamos tomar decisiones, dadas las normas que imponían facultades a los diferentes estamentos del Banco”, manifestó el testigo, justificando los motivos de la consulta. Mas adelante, preguntado sobre este tema, dijo que no cayó muy bien esta actitud de rechazar cheques de las cuentas de los Fernándes: hubo un malestar generalizado y pensaban que había actuado mal adjudicándosele una mala administración, diciendo que ese rechazo manchaba a las empresas de estos importantes clientes. Esa misma tarde, afirmó Pavka, hubo llamados de Barcia y Jones para interiorizarse sobre ese rechazo, aunque los llamados fueron hechos al contador Williams, según este último le había podido manifestar. En ese momento Jones era ministro de Economía y Barcia estaba a cargo de la presidencia del Banco, aunque ese día no se encontraba en la institución, probablemente con alguna licencia. En algún momento se hizo alusión a la chacra 8 de Aridos Fontana, indicando que en 2001 dio la orden para la imputación contable como bien en defensa del crédito, dadas las indicaciones recibidas desde la auditoría externa en tal sentido, ya que erróneamente se había imputado en el rubro bienes diversos y detalló que el Banco había recibido una intimación de parte del Municipio de Rawson por pago de impuestos, con un valor cercano a los nueve millones de pesos. NO SE PERMITIO INCORPORACIÓN DE DOCUMENTACIÓN En el inicio de la Jornada, el Tribunal presidido por el Dr. Roberto Portela, acompañado por la Dra. Ana Servent y el Dr. Darío Arguiano dio a conocer la resolución mediante la cuál no hizo lugar a la incorporación probatoria de la documentación solicitada por Fiscalía. Cabe recordar que ayer, el Dr. Baez hizo mención a la relación esgrimida por el propio imputado Arrechea con la familia Menéndez, al frente de la empresa Aridos Fontana, y amparándose en el artículo 347 del Codigo Procesal Penal, solicitó la incorporación de una serie de expedientes penales y civiles, a lo cuál se opuso terminantemente el defensor, Dr. Raúl Heredia. Esos expedientes aluden a demandas cruzadas entre los Menéndez y Arrechea por presunta usurpación de la cantera de Aridos Fontana, probable administración infiel de la sociedad comercial y solicitud de exclusión del actual imputado como socio de la empresa. Algunas de estas causas se encuentran en el Archivo de Tribunales y la de fuero civil, actualmente desistida. En tanto, una de ellas, denominada causa “Gabelco”, ha sido elevada a juicio oral ante la Cámara Criminal nro. 1 de Trelew, a la espera de debate oral.