Continuará el próximo martes
Con los alegatos desarrollados por los Dres. Guillermo Hervida, defensor de José Carrizo y Ramón Antonio Monge, que tiene como cliente a Luis Vila, se llevó adelante una nueva jornada del Juicio Oral y Público denominado megacausa, que investiga probables maniobras fraudulentas contra el Banco del Chubut.
El Dr. Hervida alegó a favor del ex gerente de sucursal Trelew, José Carrizo, desligando a su defendido de la acusación efectuada por Fiscalía en torno a la acreditación de 85 cheques sobre la cuenta del Grupo Fernández, hablando de “obediencia debida” ante las órdenes emitidas por César Ramírez, con ratificación del presidente del Banco en ese momento, contador Jorge Barcia. En una parte de su alocución indicó que el Movimiento Público Fiscal acusa por el libramiento de cheques en diferentes operaciones, cuando en realidad no se encuentran las pruebas de tales libramientos y la pérdida no se produjo en oficinas del Banco, sino en la propia sede judicial, encontrándose en los expedientes solo fotocopias de los cartelares, aunque efectuadas sobre el anverso y no el reverso.
Puso énfasis en esta situación, preguntándose si puede condenarse a alguien a través de fotocopias utilizadas como pruebas. Manifestó que se pueden cotejar esas copias con formularios de alta de valores, no existiendo la fecha de los libramientos de los cheques. Indicó que los cheques tenían fecha de 21 de marzo y habrían sido pagados en forma anticipada el 16 de marzo, según la acusación, pero es posible que esto haya sido salvado en el reverso, como debe hacerse y esas pruebas no estan.
Esta defensa entiende que Carrizo no es funcionario público, dijo Hervida, agregando que por lo expuesto y teniendo en cuenta la acusación efectuada por la querella y la Fiscalía, tomaba las palabras de Di Giovanni cuando menciona que los gerentes de sucursales no fueron responsables de los hechos en esta causa, solicitando la absolución de José Carrizo, fundamentalmente por falta de pruebas.
ALEGATO DE MONGE
El Doctor Ramón Antonio Monge llevó adelante el alegato en defensa de Luis Vila, ex gerente comercial del Banco del Chubut, planteando la nulidad de todo lo actuado, debido a la muerte del proceso desde un principio. Hizo un recorrido por la historia de los derechos humanos correspondientes a partir de lo que fue, según sus palabras, lo vivido en los días que estuvo detenido Vila, describiendo una situación paupérrima de las condiciones carcelarias. Para esto trajo a colación derechos internacionales y leyes surgidas por los años de 1700 en Filadelfia, por ejemplo y sentando como antecedentes situaciones de Estados Unidos
Dijo mas adelant que el Juez de Instrucción desconoció “olímpicamente” todos estos derechos por ignorancia o arbitrariedad, siendo a partir de allí todos los actos nulos de nulidad absoluta. Dijo que pudo haber corruptela, actos irregulares, pudo haber hasta ciertos clientes privilegiados y eso no quiere decir que el Banco haya sido defraudaddo por sus directivos. Esa corruptela no tiene tipicidad, no es delictuoso, admitió el abogado.
Reiteró el concepto de nulidad por indebido proceso legal y pidió la prescripción de la acción, adhiriéndose a todas las nulidades planteadas por el Dr. Heredia.
En la última parte fue mencionando cada uno de los hechos donde se acusa a Vila por su actuación como funcionario bancario en las posibles maniobras, dando a entender que en el de Aridos Fontana no tuvo injerencia, estando probado por la documentación que Jones había asignado a Beros para el manejo de esa cuenta.
Sobre el crédito a Palavecino, aludió a que éste era testaferro de Jacobsen, siendo un acto simulado. La simulación no engaña a nadie, expresó, los contratantes saben, se hacen contradocumentos. Acá el tercero no puede ser el otro simulador, pero no puede ser el Banco, que hizo la documentación. Palavecino era un trabajador, dijo el Doctor Monge, y si esto fue así, que delito cometió prestandole el nombre a otro, cuestionó. Agregó que lo dijo el gerente Vidal y no fue acusado, que todo fue hecho a pedido de la señora Beros, que se interesó para darle trabajo a este hombre, en tiempos de revolución productiva, 1998, fruta fina, pesca , todo era una política de estado: dónde está el delito?, reiteró.
En el hecho de Tecneco citó el peritaje del contador Jiménez, diciendo que era una límpida defensa de Vila con sólidos argumentos contables y jurídicos, considerándolo el vademécum de esta defensa para refutar los cargos. En lo que se refiere a Patagonia Sea Food indicó que los Fernándes son solo directores de la empresa con responsabilidad extendida o refleja, pero el presidente no está acusado. “ No se mide a todos con la misma vara, hay hijos y entenados, y esto atenta contra la imparcialidad”, dijo Monge, admitiendo que Vila dio el visto bueno de esta operación, dado que se quería ampliar la producción de la pesca para dar riquezas y trabajo, no llevándose a cabo finalmente por una mala política del Estado nacional.
Finalízó expresando que Vila es un hombre honesto, vive modestamente, con muchos sobresaltos a partir de la descalificación y su situación en el banco, hablando de un antes y un después a partir de la cárcel que sufrió. Solicitó al Tribunal un acto de Justicia, sobreseyendo a su defendido, confiando en una absolución amplia, no por el principio de la duda, sino por las falencias, a partir de un proceso que nació muerto, con faltas de pruebas. No hay tipicidad, juridicidad ni culpabilidad, concluyó el profesional.
La Megacausa continuará el próximo martes 18 de agosto desde las 9 hs. en el Teatro Verdi de Trelew, esperándose que durante la semana brinden su alegato el Dr. Emilio Galende, defensor de César Ramírez y el escribano Ricardo Abraham, y luego el Dr. Oscar Pandolfi, defensor de los hermanos Héctor y Orlando Fernándes, finalizando con esta ronda.
