Durante el desarrollo de un juicio oral, el Ministerio Público Fiscal representado por la fiscal general Julieta Gamarra pudo acreditar los hechos ocurridos hace siete años, mediante los cuales fueron acusados los policías Adrián Antonio Rojas y Walter Alfredo Méndez por los delitos de vejaciones y lesiones graves. La parte acusadora estuvo acompañada por la querella en representación de la familia, ejercida por el defensor público Carlos Pericich.